¿Murió el indigenismo en Bolivia? Así lo sostiene el analista Fernando Untoja
Según Untoja, el discurso identitario fue utilizado como herramienta política para imponer un modelo autoritario
El analista político y académico Fernando Untoja sostuvo, en una reciente entrevista con Correo del Sur Radio, que la narrativa indigenista impulsada durante las últimas dos décadas en Bolivia llegó a su fin. Según Untoja, el discurso identitario fue utilizado como herramienta política para imponer un modelo autoritario bajo el pretexto del “marxismo indígena”, lo que considera un intento fallido de instaurar una dictadura.
“El indigenismo ha muerto”, declaró, afirmando que este concepto fue una construcción artificial promovida por ONGs, políticos europeos —particularmente españoles— y corrientes posmodernas. En su visión, el uso del término “indígena” fue más un instrumento de división que de integración nacional.
Untoja propuso que Bolivia necesita enterrar definitivamente el indigenismo y dejar de utilizar esa categoría incluso en el discurso público, sostiene que solo sirvió para fragmentar al país en todas sus regiones y sembrar resentimiento étnico.
A pesar de ello, reconoció que esta tarea requiere una alternativa política coherente. Argumentó que se necesitan “candidatos coherentes con propuestas claras”, personas que planteen trabajo para la población joven y se queden en Bolivia.
En cuanto a la coyuntura política, observó que dentro del Movimiento al Socialismo (MAS), aún hay posibilidad de una reunificación. “En esta semana pueden aglutinar uy concentrar sus fuerzas en un solo candidato, puede ser Del Castillo o Andrónico” declaró y precisó que “están esperando la venia de Evo Morales”, para alguno de los dos
Esta movida, dice, podría revitalizar al oficialismo y captar a los votantes indecisos, lo que representa una amenaza para la oposición.
Por el lado opositor, Untoja ve debilidad y falta de rumbo. Criticó la ausencia de una estrategia ideológica clara para contrarrestar el voto identitario que ha sido sembrado por el MAS. “La oposición no tiene capacidad de hacer esa lectura, creen que la gente va a cambiar solo por la crisis y la corrupción. No funciona así”, lamentó.
Para Untoja, la salida pasa por un balotaje entre dos candidatos con seriedad y visión de país. Mencionó a Samuel Doria Medina y Jorge Tuto Quiroga como opciones viables, siempre que se enfoquen en propuestas realistas y trabajen estratégicamente. “Solo un balotaje entre ellos puede salvarnos del comunismo”, advirtió.
Finalmente, propuso una “batalla cultural” desde un próximo gobierno, que liquide el uso político del discurso étnico y trabaje por una ciudadanía cohesionada bajo un Estado con reglas claras. Dejar de hablar de “indígenas” no significaría —según aclaró— negar las culturas del país, sino más bien construir una identidad nacional que trascienda el uso político de la etnicidad.