Vice de Andrónico defiende el gasto del gobierno de Evo
Mariana Prado se deslindó de la administración de Luis Arce: “Yo, en particular, no me voy a hacer cargo de una gestión cuando hace seis años ya no soy ministra, y además no he estado en ningún cargo público”
Durante el debate vicepresidencial organizado por Unitel, Mariana Prado, compañera de fórmula de Andrónico Rodríguez, fue cuestionada por evitar mencionar o criticar las deficiencias de la gestión de Evo Morales, en cuyo mandato se desempeñó como ministra de Planificación entre 2017 y 2019.
En el bloque de propuestas económicas para enfrentar la actual crisis, Prado afirmó que desde la presidencia de la Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP) impulsaría la activación de una línea de crédito de 7.000 millones de dólares con China y el financiamiento de los BRICS, además de inyectar recursos a través de la producción de oro y la explotación de campos maduros de gas.
No obstante, durante la ronda de preguntas entre candidatos, José Luis Lupo y Juan Carlos Medrano criticaron duramente al Movimiento Al Socialismo (MAS), señalando un “despilfarro” en proyectos como el avión presidencial, el museo de Evo Morales y casos de corrupción como el del Fondo Indígena. Lupo acusó al expresidente Morales y a su entorno de “meter la mano hasta en los ahorros sagrados de los bolivianos”
Lupo le cuestionó: “¿Cómo podemos creer los bolivianos que ustedes, que han causado esta crisis, la van a solucionar?”
Ante estas críticas, Prado defendió la gestión de Morales asegurando que su modelo económico permitió sacar de la pobreza a tres millones de personas y mejorar las condiciones de vida de amplios sectores.
“Es inaceptable decir que el dinero ‘se ha farreado’; eso se ha convertido en obras, en mejoras para la gente”, respondió. Además, se deslindó por completo del actual gobierno de Luis Arce: “Yo, en particular, no me voy a hacer cargo de una gestión cuando hace seis años ya no soy ministra, y además no he estado en ningún cargo público”, dijo ante la crítica de Medrano
La candidata también reivindicó que, durante el gobierno de Morales, se logró “dignificar” a la población más vulnerable.
Muchas cifras y pocos datos confiables
El debate estuvo marcado por un uso recurrente de cifras supuestamente contundentes, pero sin respaldo técnico ni fuentes verificables. Cada candidato presentó datos que reforzaban sus propuestas, aunque estos muchas veces se contradecían entre sí.
La falta de precisión y la ausencia de referencias claras dejaron a la audiencia sin herramientas para verificar la veracidad de lo expuesto.