¿Quién es Xiomara Castro, la presidenta hondureña que llegó a Bolivia?
Su vínculo con la política comenzó a tomar fuerza cuando su esposo, Manuel Zelaya, llegó a la presidencia en 2006
Xiomara Castro, presidenta de Honduras, fue la primera mandataria en arribar al país en el marco de los festejos por el Bicentenario. Aterrizó la mañana de este lunes en el aeropuerto Alcantarí para luego trasladarse a Sucre y participar de los actos.
Es la primera vez que la máxima autoridad hondureña llega a territorio boliviano para cumplir una agenda oficial.
Castro hizo historia en enero de 2022 al convertirse en la primera mujer en asumir la presidencia de Honduras. Nacida el 30 de septiembre de 1959 en Tegucigalpa, es licenciada en Administración de Empresas y, antes de ingresar a la política, se dedicó a la gestión de las empresas familiares en los sectores maderero, agrícola y ganadero.
Su vínculo con la política comenzó a tomar fuerza cuando su esposo, Manuel Zelaya, llegó a la presidencia en 2006, aunque su mandato fue interrumpido por un golpe de Estado el 28 de junio de 2009. Tras el derrocamiento, Castro pasó del rol de primera dama a convertirse en una figura de resistencia: lideró manifestaciones en las calles, se unió al Frente Nacional de Resistencia Popular y fue una de las fundadoras del partido de izquierda Libertad y Refundación (Libre) en 2011.
Se postuló a la presidencia en 2013, obteniendo el segundo lugar. En 2017, optó por ser compañera de fórmula de Salvador Nasralla en una alianza opositora, que también quedó en segundo lugar. Finalmente, en marzo de 2021 ganó las internas de su partido y, en las elecciones generales de noviembre de ese año, logró una victoria histórica que puso fin a más de una década de gobiernos del Partido Nacional.
Castro asumió el poder con una agenda reformista y una fuerte expectativa de transformación social, en particular por parte de los movimientos feministas y sectores populares. Sin embargo, su gestión no estuvo excenta de tensiones, enfretó divisiones internas en su partido, críticas por no avanzar lo suficiente en temas de género y transparencia, y denuncias de corrupción que salpicaron a personas cercanas, como su cuñado Carlos Zelaya.