COB convoca a ampliado para definir futuro de las movilizaciones tras nueva jornada de protestas

La Central Obrera Boliviana (COB) definirá este jueves en un ampliado nacional la continuidad de sus medidas de presión en rechazo al Decreto Supremo 5503, que eliminó la subvención a los combustibles. Tras una tercera jornada de marchas en la sede de Gobierno, la dirigencia sindical ratificó su postura de mantener las movilizaciones, incluso durante las fiestas de fin de año, mientras el Ejecutivo aguarda un cuarto intermedio para retomar el diálogo.

Este miércoles, sindicatos de mineros, fabriles y maestros urbanos recorrieron las principales calles del centro histórico de La Paz por tercer día consecutivo. A diferencia de los choques violentos registrados el martes, la columna de manifestantes se desplazó sin incidentes con la Policía, aunque detonó petardos y dinamita en los alrededores de la plaza Murillo. Los accesos al centro del poder político permanecieron resguardados por efectivos antimotines y vallas de seguridad que impidieron el paso de la marcha.

El dirigente cobista, Mario Argollo, informó que el encuentro de este jueves servirá para evaluar el alcance de las protestas y determinar las próximas acciones. “Las bases han determinado continuar con las movilizaciones. El día de mañana vamos a tener un ampliado con las bases y vamos a evaluar toda la semana de movilización, incluido la Noche Buena”, afirmó Argollo. El representante sindical calificó la normativa como “peor que el 21060” y aseguró que su sector no asistirá a mesas de trabajo si no existe una voluntad de revisión del decreto.

Por su parte, la presidenta del Comité Nacional de Amas de Casa Mineras, Miriam Huarina, protestó porque “todo está por las nubes” y consideró que “hay familias que apoyan” las medidas económicas dispuestas por el Gobierno de Rodrigo Paz por los incrementos de bonos sociales que acompañan el retiro de la subvención de los combustibles.

“El pueblo que va a percibir ese bono que se dé cuenta que ni ese bono les va a alcanzar para los pasajes de sus hijos, para solventar la canasta familiar. Tiene que darse cuenta el pueblo boliviano y unirse a nosotros, porque nosotros no estamos aquí por gusto, estamos por todo el pueblo”, aseguró Huarina.

Desde el Órgano Ejecutivo, el viceministro de Coordinación Legislativa, Wilson Santamaría, manifestó que el Gobierno mantiene la disposición de dialogar, pero instó a la dirigencia a deponer las medidas de fuerza. “Estamos esperando con atención que el ampliado de los trabajadores, mayoritariamente pueda impulsar un cuarto intermedio y le dé como mandato a la dirigencia de la COB que acudan al diálogo”, señaló la autoridad.

El conflicto se mantiene tras la aplicación del Decreto 5503 por parte de la administración de Rodrigo Paz, que estableció un incremento del 86% en el precio de la gasolina y del 162% en el diésel. Como medida paliativa, el Gobierno dispuso el aumento del salario mínimo nacional de 2.750 a 3.300 bolivianos, además de mejoras en los bonos sociales para estudiantes y adultos mayores. Según datos oficiales, la medida permitió un ahorro estatal de 10 millones de dólares diarios y redujo el contrabando de carburantes en un 30%.

Pese al paro indefinido que sostienen los sectores afiliados a la COB, otros gremios como el transporte, comerciantes y mineros cooperativistas cesaron sus protestas tras alcanzar acuerdos con el Ejecutivo. Durante el recorrido de hoy, algunos ciudadanos paceños también manifestaron su rechazo a los bloqueos y marchas, exigiendo a los sectores movilizados retomar sus fuentes de trabajo.

La protesta fue criticada por varios transeúntes que en distintos puntos del recorrido increparon a los manifestantes y les gritaron “fuera”, “vayan a trabajar”.