Marcha contra un asesino y violador termina en destrozos en Llallagua

Una multitudinaria movilización de los vecinos del municipio de Llallagua terminó este jueves con la quema de la Defensoría de la Niñez y destrozos en las oficinas de la Fiscalía y la Policía, en protesta por la violación y asesinato de una niña de cuatro años. Los manifestantes también quemaron la casa del supuesto autor del crimen.

Las autoridades declararon toque de queda a partir de las 22:00 horas del jueves.

La vejación y asesinato causaron indignación entre la población, que reaccionó contra las instituciones responsables de la seguridad, los derechos de la ciudadanía y de la niñez. El presunto autor es un joven de 16 años de edad, que fue protegido por la Policía y llevado a la ciudad de Potosí ante el riesgo inminente de linchamiento.

La víctima desapareció el 7 de mayo en la vecina Siglo XX y fue aparentemente raptada y luego violada y asesinada por el joven. El miércoles se halló su cuerpo sin vida.

Ante los hechos, los efectivos policiales tuvieron que replegarse por orden del Comando Departamental de la Policía mientras el gobernador potosino, Félix Gonzales, llamó a la calma a la población.

A las 13:45, la ciudadanía se trasladó a las afueras de la Defensoría de la Niñez, dependiente de la Alcaldía, y procedió a quemar todo. "Están quemando todo, muebles, computadoras, televisores. Está quemándose toda la Defensoría", informó a ANF el periodista Héctor Mariaca, de radio Pio XII.

Gary Sandi Vigabriel, un vecino de la localidad, también informó desde su cuenta de Twitter que la multitud había quemado escritorios y mobiliario de oficinas de la Defensoría. Luego dijo que la Policía no dejaba filmar o tomar fotografías.

También escribió: "El autor confesó dos asesinatos (2 menores) y fue capturado cuando intentaba hacer un 3er secuestro de otra menor"; durante la mañana alertó sobre la movilización de la ciudadanía, el uso de dinamitas, petardos y el malestar que provocó el hecho delictivo.

Las movilizaciones empezaron en la víspera, cuando manifestantes destrozaron puertas y ventanas de la Policía. El jueves, un grupo de vecinos colocó una dinamita en la puerta principal de la Fiscalía, aunque según el reporte de Mariaca no se sustrajeron documentos. Otro de los objetivos de la población fue la Escuela Básica Policial de Siglo XX, de la que destruyeron puertas y ventanas de las habitaciones y del comedor.