Mendoza: Fallos del TCP demoran un año
Valencia afirmó que la temática del curso en China no se aplica a la labor de Tribunal
El Tribunal Constitucional Plurinacional (TCP) tiene una demora de un año en la resolución de acciones constitucionales, reveló ayer el magistrado suplente Milton Mendoza, que se sumó a los cuestionamientos a los magistrados que prefirieron viajar a China para asistir a un curso que nada tiene que ver con la labor específica de resguardar los derechos constitucionales; aunque los tribunos que retornaron de China afirmaron que dejaron todo al día y siguieron resolviendo causas desde fuera del país.
Mendoza aseguró que no se justifica el viaje de una mayoría de los siete tribunos a un curso destinado a funcionarios públicos que están iniciando su formación y no exclusivamente para magistrados.
El magistrado que no fue convocado para nada al TCP, aseguró que el trámite de una acción constitucional se demora un año hasta la emisión de la sentencia y se notifica a las partes con fechas anticipadas que no son reales; por esto no se justifica una ausencia prolongada de los titulares que dejaron sin quórum a la Sala Plena y peor si el Presidente no convocó a los suplentes, excepto a una, pero al filo del retorno de los titulares.
“Basta que usted revise una acción constitucional que ha sido derivada al TCP a principios de este año, verá que en la página web no está registrada, y se están poniendo fechas posdatadas y eso lo denunciaron los propios abogados”, puntualizó Mendoza.
Por su parte, el magistrado del TCP, Oswaldo Valencia, que fue relegado a su sala, acotó que la temática del curso para funcionarios públicos a la que asistieron cuatro magistrados y 16 funcionarios en China, no se aplica para nada a la labor de este órgano.
“El TCP tiene una labor específica y la más importante es la tutela de los derechos fundamentales constitucionales como el derecho a la vida; un día que no se trabaja hay personas reclamando estos derechos”, aseguró Valencia, quien denunció que su personal también sufre represalias con anuncios de despidos.