Piden revisar pena del microtráfico que afecta más a mujeres
La UNODC sugirió alternativas para evitar el encarcelamiento de los microtraficantes
El representante en Bolivia de la Oficina de Naciones Unidas Contra las Drogas y el Delito (UNODC, por sus siglas en inglés) pidió reducir las penas del microtráfico para así evitar el encarcelamiento de quienes cometen delitos considerados menores en relación con el uso y consumo de drogas. En su informe presentado ayer en La Paz, el organismo internacional manifestó su preocupación debido a que Bolivia lidera la región en cuanto a casos de mujeres detenidas por microtráfico.
“En Bolivia tenemos un número de mujeres privadas de libertad más alto que otros países de la región, el cual ya tiene un promedio más alto que en otras regiones”, manifestó Antonino De Leo, presentante de UNODC en Bolivia.
De Leo recomendó a las autoridades que se realice una revisión de las nomas de régimen de sustancias controladas para que se enfoque en los niveles más altos relacionados al problema.
“Hay que orientar la nueva ley o futura ley de sustancias controladas hacia una lucha contra las grandes redes del crimen organizado, más que en los eslabones más débiles de la cadena”. De igual forma resaltó la necesidad de establecer medidas alternativas al encarcelamiento para delitos menores relacionados con drogas.
Por otra parte, la institución internacional ratificó al país como el tercer productor de coca, después de Colombia y Perú.
La autoridad de las Naciones Unidas indicó que el número de drogodependientes en adultos a nivel mundial se incrementó por primera vez en seis años, llegando a 29 millones de habitantes.
El informe mundial sobre las drogas 2016 desvela que existen 569 nuevas sustancias psicoactivas que aparecieron entre 2008 y 2014. En la pasada gestión aparecieron 75 tipos de estas drogas, que son más conocidas como sintéticas. Entre las sustancias comunes, la marihuana sigue siendo la más consumida a nivel global, seguida de los estimulantes de tipo anfetamínico, los opioides y la cocaína.
Un estimado de 183 millones de personas a nivel global consumió la marihuana en 2014.