Feminicidio fue registrado como muerte por chagas
La madrugada del 30 de octubre, la joven madre apareció muerta por un golpe certero en la cabeza, presuntamente propinado por su pareja

Tras matar a Araceli Aguilera, la madrugada del 30 de octubre, en Muyupampa, con un golpe contundente, el concubino intentó atribuir el deceso de su concubina al chagas. Ayer, el imputado de feminicidio intentó recobrar su libertad a través de un recurso de apelación incidental que le fue denegado.
La causa de la muerte por chagas se encuentra en un documento que corresponde al hospital de Muyupampa y que está en manos de Teresa Caballero, madre de la víctima.
A decir de Caballero, con ese informe intentaron enterrar a su hija sin que se practicara el examen médico forense. Inicialmente se paralizó esa acción porque el médico no registró correctamente el nombre de su hija: puso Araceli Caballero en vez de Aguilera. Ese dato fue observado por la Notaria de Fe Pública del pueblo, según la madre de la víctima, quien siguió todo ese drama desde España, donde se encontraba trabajando.
En el documento se puede observar un pie de firma con el nombre de un médico, pero que no está rubricado, y el sello de ese hospital. Sin embargo, la mamá aclaró que quien elaboró el informe fue otro médico de quien ayer no recordó el nombre.
Tras enterarse de esta situación, dijo que insistió en que se realizara la autopsia, pues ya se había enterado que su hija había fallecido por un golpe en la cabeza y que tenía otras lesiones.
Caballero no se explica cómo es posible que un médico habiendo visto que su hija tenía sangre en el cuerpo hubiera atribuido la muerte al chagas. Quizá, sostuvo, porque ella padecía de esa enfermedad.
La madre expresó su temor de que el caso podría ser influenciado por factores políticos debido a que la madre del sospechoso de matar a su hija es dirigente regional del Movimiento Al Socialismo (MAS) y trabaja en una Dirección Departamental de la Secretaría de Desarrollo Humano y Social, aseguró.
Recalcó que lo que sucedió con el primer informe médico de la causa de muerte de su hija, es una muestra de aquello.
EL SUPUESTO FEMINICIDIO
Araceli Aguilera, de 21 años de edad, era madre de dos niñas: una de dos años y siete meses y otra de mes y medio. Vivía con Mayber Rodas en concubinato desde hace tres años, en medio de una relación que se había tornado violenta en los últimos meses.
La madre de Araceli se enteró hace tres meses que el concubino siempre la maltrataba; en dos oportunidades acudió al Servicio Legal Integral de la Mujer pero no fue escuchada. Le habrían preguntado: "¿Dónde están los hematomas que dices?" “No le hicieron caso. Ahora están las consecuencias así”, comentó la madre.
La madrugada del domingo 30 de octubre, Araceli apareció muerta en la vía pública, a unos metros de la puerta de ingreso a su casa en el pueblo de Muyupampa.
Según los hechos, esa madrugada, Mayber llegó a su casa con aliento alcohólico lo que provocó una discusión entre ambos. Luego, la joven tomó a su bebé que no hace mucho había dado a luz por cesárea y se levantó de la cama.
Él la siguió y en el patio sostuvieron una pelea. Prueba de ello es que el imputado tiene lesiones defensivas en el rostro, cuello, pierna y dedos de sus pies. La evidencia se encuentra en el muestrario fotográfico que se tomó al imputado, dijo el abogado de los familiares de la víctima, Sergio Vildozo.
Luego, el agresor habría tomado de la cabeza a Araceli y habría golpeado violentamente contra una columna de concreto. La evidencia: las manchas de sangre que se localizaron en ese punto y en la pared. El informe médico forense sostiene que la muerte fue instantánea.
A continuación, el agresor habría arrastrado el cuerpo de la víctima para sacarlo de la casa. La arrastró por un trecho de tierra y ripio, y por otro de asfalto. La madre dijo que debió recorrer unos diez metros. Prueba de ello son las escoriaciones en el cuerpo de Araceli.
En su declaración, el imputado alegó que encontró el cuerpo de su concubina tirado en el patio y que en su desesperación arrastró el cuerpo hasta la calle para intentar salvarlo.
LA APELACIÓN
El imputado intentó recobrar su libertad ayer, mediante un recurso de apelación incidental alegando su inocencia en el hecho y que desde un principio mostró su intención de cooperar con la justicia. Su defensa hizo ver que el imputado nunca tuvo intención de fugar.
La audiencia se realizó la tarde de ayer en la Sala Penal 2° a cargo de los vocales Hugo Córdova y Elena Lowenthal, quienes coincidieron en denegar la petición, por lo que el hombre permanecerá detenido preventivamente en la carceleta de Monteagudo, aunque la familia de la víctima pidió que sea trasladado a la cárcel San Roque de Sucre.