35 privados de libertad se benefician con el indulto
El último en beneficiarse fue un condenado a diez años de prisión

“A partir de ahora quedan libres”. Es la frase que la jueza de Ejecución Penal de la Capital, Vidalia Morales, suele pronunciar cuando un reo va a recuperar su libertad porque cumplió su sentencia o se benefició con algún indulto. De diciembre a agosto, con el Decreto 3030, la Jueza pronunció 35 veces esa frase para liberar a igual número de personas.
La mayoría de los reos que se beneficiaron con el indulto que el presidente Evo Morales firmó el 24 de diciembre de 2016, son condenados que cumplían sus penas por tráfico de sustancias controladas, los más, relacionados con marihuana.
Por ejemplo, el último en beneficiarse con el indulto en Chuquisaca fue un condenado a diez años de prisión por tráfico de sustancias controladas, porque al cumplir un cuarto de la pena se acogió al beneficio que busca combatir el hacinamiento en las cárceles del país.
“Les estamos devolviendo a la sociedad”, les dijo Morales a dos jóvenes reos que cumplían condenas en la cárcel San Roque y que también fueron declarados libres en aplicación del Decreto 3030.
Uno de ellos fue sentenciado a cinco años de prisión por el delito de inducción, de los cuales cumplió un año, dos meses y 18 días. El otro fue condenado a ocho años de cárcel, de los que cumplió un año, cuatro meses y 12 días. Coincidentemente, ambas personas son padres de familia de dos niños.
Los indultos son tramitados por la Dirección Departamental de Régimen Penitenciario, que remite los documentos a la Dirección Nacional para que en esa instancia se apruebe o rechace la solicitud. Si la petición de indulto es aceptada, la solicitud de libertad se remite al Juzgado de Ejecución Penal.
Morales manifestó que en los tres casos de indulto que atendió últimamente, los sentenciados no tenían antecedentes penales, lo que jugó a su favor para acogerse al beneficio. Advirtió que si los indultados vuelven a cometer cualquier tipo de delito, de hecho, será considerado con agravante, toda vez que el Estado y la sociedad les dio una oportunidad para reinsertarse a la vida civil.
Finalmente, sostuvo que espera que el tiempo que las personas indultadas estuvieron en la cárcel les haya servido para reflexionar sobre sus actitudes y no vuelven a cometer los mismos errores.