La Paz: La temida familia León tenía en vilo a sus vecinos
Peleas a puñetes entre los hermanos León Fernández, persecuciones con machetes a amistades momentáneas, golpes con fierros, consumo de alcohol durante días enteros y amenazas de muerte. No, no es ficción.
Peleas a puñetes entre los hermanos León Fernández, persecuciones con machetes a amistades momentáneas, golpes con fierros, consumo de alcohol durante días enteros y amenazas de muerte. No, no es ficción. Así era el día a día de esta familia que puso en vilo a los vecinos de la zona San Simón todos estos años.
Este lugar paceño está ubicado en la ladera este del Barrio Gráfico, donde el viernes 19 de enero fueron encontrados los cuerpos de Carla Bellot y Jesús Cañisaire, asesinados brutalmente en una de esas viviendas, según Página Siete.
En las calles, hay poco movimiento, los vecinos permanecen en sus domicilios, uno que otro camina por el lugar. Pero cuando escuchan preguntar sobre la familia León de repente algunos salen de sus domicilios, se acercan de a poco y confiesan el miedo que sienten por la presencia de la madre y sus siete hijos que tienen a las familias atemorizadas.
“Son tremendos, aquí no tienen comunicación con los vecinos, les tenemos miedo porque a veces los hijos corretean con machetes a la gente que viene a quedarse en sus casas o a cualquier otra persona. Da miedo”, cuenta una joven vecina del lugar.
En el barrio los León tienen al menos tres viviendas. La que está más arriba, cerca del barrio 24 de Junio, pertenece a los abuelos. La segunda casa es de Israel León y su concubina Estefany Guizada, está casi al pie del cerro. A este lugar, según la investigación, llegó la pareja con los implicados para continuar el festejo de Año Nuevo y donde fue asesinada. En el tercer inmueble, más cerca de la cancha Petrolera, vivía Eliot León con su pareja Priscila Choque.
Los vecinos de San Simón evitaban cualquier contacto con los hermanos León. “No sabemos con qué nos van a responder, si nos van a amenazar o si nos van a golpear”, confiesa Arturo E.
Según la gente del barrio la mañana del 1 de enero no escucharon ni vieron algo extraño en la casa de Israel León. “Por las noticias nos enteramos del asesinato, pero cuando saltó ese apellido fácil nos hemos dado cuenta que eran ellos, ¿quiénes más?”, dijo Carola, vecina del lugar.