Dan el último adiós a ocho fallecidos de una familia en Oruro
Continúan las investigaciones sobre la explosión que enlutó el Carnaval
Vecinos de Oruro dieron este lunes el último adiós, entre escenas de llanto y dolor, a los ocho miembros de una familia que fallecieron el sábado tras la explosión de una garrafa de gas en el festejo de Carnaval en esa ciudad.
Los restos fueron llevados al cementerio general en tres carrozas fúnebres en medio de desgarradoras expresiones de angustia y sufrimiento.
Los fallecidos son Herberth Gutiérrez Fernández (38), Janeth Vicenta Gutiérrez (47), Ariana Fátima Herrera (16), Nicole Gutiérrez Guarachi (4), Ana Fernández de Gutiérrez (71), Giselle Katherine Balderrama Gutiérrez (24), Gabriel Fernández Gutiérrez (7) y Emily Fernández Gutiérrez (2).
Familiares, amigos y vecinos acompañaban a los ataúdes a pie, otros en vehículos, hasta el cementerio general, con música fúnebre, en una tarde nublada en la ciudad de Oruro.
El sábado cerca de las 18:30, la explosión de una garrafa de Gas Licuado de Petróleo (GLP), durante la Peregrinación del Carnaval de Oruro 2018, dejó un saldo de ocho fallecidos y al menos 40 heridos. El hecho ocurrió en la interjección de las calles Bakovic y del Ejército.
De acuerdo con las primeras investigaciones de la Policía, la tragedia se produjo por el derrame de aceite caliente sobre una manguera conectada a una garrafa, lo que produjo la fuga de gas que terminó en explosión, aunque se afirmó que hay varias hipótesis que una vez esclarecidas se darán a conocer.
El Gobierno Autónomo Municipal de Oruro expresó su profundo pesar por la pérdida y se comprometió a pagar todos los servicios funerarios para las ocho víctimas, “incluyendo el salón velatorio y el pago por el uso de nichos y otros, para garantizar el sepelio en el Cementerio General”, según cita la nota de prensa de la entidad.
Sin embargo, los dolientes hasta el momento no recibieron ningún tipo de ayuda de ninguna autoridad. Los restos de las ocho personas fueron velados en un salón prestado y en el cementerio no saben quién les esperará ni dónde enterrarán a las 8 personas, según cita Opinión.