Juicio: Juan del Granado testifica en EEUU y apunta sus dardos a Sánchez Berzaín

El ex alcalde de La Paz, Juan del Granado, declaró este jueves en el Juicio Civil que le siguen al ex presidente Gonzalo Sánchez de Lozada y a su ministro de la Presidencia de ese entonces, Carlos Sánchez Berzaín, en la corte de Fort Lauderdale, Florida (Estados Unidos).

La ex autoridad edil recordó que su Alcaldía se declaró en emergencia durante los luctuosos hechos de 2003. Sostuvo que llamó a Sánchez Berzaín, pero no pudo conseguir su objetivo, aunque el Ministro le devolvió la llamada recién a las cinco de la tarde, con quien habló por al menos cinco minutos.

Respondiendo a preguntas del abogado de los demandantes Joseph Sorkin, el ex Alcalde comentó que le dijo a Sánchez Berzaín que la situación está muy grave y que el Gobierno tiene que pacificar porque ya hay muertos. “Alcalde no importa si hay cinco o 50 (muertos) más siempre que resolvamos el problema”, le habría dicho la autoridad del Ejecutivo.

“Le respondí que es una barbaridad. Resuelvan el problema. No puede morir más gente”, dijo Del Granado, pero Sánchez, conocido como “el zorro” habría respondido: “así no más es”.  

La declaración del ex Alcalde se produce un día después que el propio Sánchez Berzaín dijera que ese diálogo en esos términos no se produjo. Y aseguró que del Granado estaba mintiendo, según ofreció detalles el periodista Erick Foronda.

Del Granado contó más detalles no revelados que ocurrieron durante el 2003. La defensa le interrogó preguntándole si como Alcalde estaba presente y al tanto de las reuniones del Gobierno con algunos sectores movilizados; y sobre todo, si tenía conocimiento de un informe emitido por la OEA sobre los hechos de febrero del 2003. “Solo por los medios” respondió el ex alcalde, provocando la sorpresa del abogado defensor, quien cuestionó ¿No tuvo conocimiento del informe? ¿Tampoco de su resultado? ¿Usted como Alcalde, por algo que paso en su ciudad? “Así es la vida”, respondió Del Granado.

Recordó que en junio del 2003 Sánchez Berzaín le visitó en su casa para evaluar la coyuntura política difícil del país. Según del Granado, en esa reunión el Ministro le habría dicho que la falla de febrero fue no haber entregado más presupuesto a los policías y militares. “Tú no puedes quitarle comida a los perros que cuidan tu casa”, le dijo.

Del Granado también dijo que pudo reunirse con Sánchez de Lozada en abril del 2003. Describió que era una reunión grande con todos los alcaldes de las ciudades capitales del país.

“Goni” le pidió una reunión privada luego del encuentro con los alcaldes, en la que le preguntó qué pensaba de lo que estaba sucediendo, Del Granado aseguró haberle recomendando al entonces Presidente que haga reformas profundas, como las hizo en su primera gestión. “Convoque a una asamblea constituyente”, le sugirió, pero Sánchez de Lozada le respondió que nunca iba a convocar a una constituyente. “Estás loco”, le dijo Sánchez de Lozada.

El estado de la violencia, sin embargo, ya había tomado cuerpo en septiembre y crecía aún más en octubre.

En su relato, el sábado 12 de octubre, del Granado llamó al ministro de la Presidencia, José Guillermo Justiniano, y al mismo tiempo al dirigente campesino Rufo Calle para que campesinos y Gobierno dialoguen. El Ejecutivo designó a dos ministros que fueron al diálogo en El Alto: Guido Añez y Mirtha Quevedo.

Felipe Quispe y Rufo Calle lideraron el diálogo de los campesinos que tenían más de 70 demandas desde el 2000.  Según Del Granado, ese mismo sábado a las 19:00 le comunicaron que Sánchez de Lozada no quería establecer ese diálogo. Preocupado al respecto, el Alcalde pidió el teléfono del Presidente a Justiniano, quién no tuvo problemas en dárselo, pero “Goni” no le respondió. “No pude hablar con él”,  aseguró del Granado.

Asimismo, recordó que en una cita con el ministro de Gobierno, Yerko Kukoc, a la que asistieron Juan del Granado y Luis Revilla, su director de Gobernabilidad, actual alcalde de La Paz, se enteraron que Sánchez Berzaín sostenía la posición de mantener la línea de la fuerza, o sea, el principio de autoridad mediante la intervención militar.

Del Granado recordó también que organizó una huelga de hambre durante la crisis, pero aseguró que nunca acordaron con Waldo Albarracín y la fallecida Ana María Campero exigir la renuncia de Sánchez de Lozada. Sin embargo admitió haber sido testigo de protestas pidiendo la renuncia del ex Presidente.

Del Granado fue el único que declaró hoy, jueves, y se informó que las audiencias se reinician el próximo martes.