Egüez insiste en que no hubo fraude en judiciales

El magistrado del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) Carlos Alberto Egüez se ratificó ayer en su versión de que no hubo ningún fraude electoral en el departamento de Beni para las elecciones judiciales de 2017, y en su criterio, lo que sí hubo fue la nulidad de dos actas en una comunidad de Misión Fátima donde él resultó ganador pese a esas anulaciones y en la repetición de la votación.

“No sé por qué se habla de fraude judicial. Ya van dos años que soportamos estas calumnias, difamaciones e injurias. El propio Órgano Electoral y la candidata suplente presentaron denuncias que fueron rechazadas oportunamente en 2018”, afirmó.

Señaló que después de un año y medio de las elecciones aparecieron la notaria electoral Josefina Canchi y la magistrada suplente con una nueva denuncia sobre un hecho ya juzgado.

Egüez admitió que la avioneta en la que se recogió el material electoral de las comunidades alejadas fue contratada por el Órgano Electoral, pero desconoce si en la misma viajaban personas particulares.

“Me imagino que la notaria vino en la avioneta a entregar personalmente el acta de las dos mesas de sufragio de la comunidad Misión Fátima”, aseguró. 

Recordó que en la comunidad chimanes, de Misión Fátima, donde se anularon las dos actas él resultó ganador por mayoría en ocho mesas.

Cuestionó el proceso en la Asamblea Legislativa toda vez que el hecho se produjo cuando él no era magistrado sino postulante, y no gozaba de privilegio.

El sábado la fiscal departamental de Beni, Martha Mejía, reveló que la avioneta en la que secuestraron a la notaria electoral fue contratada por el Tribunal Electoral Departamental.