La ANP y otras organizaciones exigen investigar agresión a periodista en Potosí

La agresión este miércoles al periodista Juan José Toro, que ha denunciado constantemente la extracción ilícita de plata en el histórico yacimiento del Cerro Rico de Potosí, ha generado la indignación en el gremio periodístico.

La Asociación Nacional de la Prensa (ANP), que agrupa a los principales diarios del país, expresó su protesta y reclamó a la Fiscalía el inicio de investigaciones por la agresión a Toro, director de contenidos del diario El Potosí, afiliado a esta organización.

La secretaria ejecutiva de la Federación de Trabajadores de la Prensa de Potosí, Jeanethe Cortez, confirmó que la organización se sumó a la denuncia planteada por el Comité Cívico Potosinista, cuya inspección al Cerro Rico fue frenada justamente por el ataque a sus dirigentes y al periodista. “Es un atentado a la libertad de expresión y la libertad de información. Condenamos la acción y queremos que se dé con los autores de la agresión”, dijo Cortez.

La Asociación Nacional de Periodistas de Bolivia y la Asociación de Periodistas de La Paz también repudiaron la agresión, exigieron una investigación y la restitución de los instrumentos de trabajo a Toro.

EL HECHO

Con heridas en los labios provocadas por golpes de puño de mineros cooperativistas, exhibiendo destrozos en un teléfono móvil y sus gafas, el periodista explicó que en la mañana de este miércoles se hallaba a 500 metros de la cúspide del cerro de 4.400 metros sobre el nivel del mar.

Cuando se disponía a registrar la inspección en video, los mineros de cooperativas mineras lo golpearon, mientras alrededor otros obreros de empresas privadas hacían detonar dinamita para crear un ambiente de miedo y zozobra.

“Estamos hablando de la comisión de varios delitos: lesiones, amenazas, amedrentamiento por la detonación de cachorros de dinamita e intento de asesinato, asesinato en grado de tentativa”, explicó horas después y en oficinas de la fiscalía a la que llegó para denunciar las acciones violentas.

Entre los agresores identificó al socio de la cooperativa minera Villa Imperial, Víctor Tacuri, y sus funcionarios. “Me han quitado una grabadora, uno de los teléfonos ha sido destrozado y los lentes también y formalizo denuncia para que comience la investigación”, declaró.

Entre los antecedentes informativos de las sucesivas denuncias, se conoce que la empresa Minera Manquiri admitió que procesa entre 1.200 y1.500 toneladas diarias de cargas de óxido, al margen del trabajo de otros 60 ingenios mineros existentes en la zona.

Toro está extrañado porque la agresión se cometió en presencia del principal ejecutivo de la estatal Comibol, una entidad que tiene la misión de evitar las operaciones en la montaña emblemática.

Los expertos han advertido que la extracción de minerales desde tiempos de la colonia, puede provocar la deformación o hundimiento de la imagen icónica.

“El Cerro Rico se está hundiendo; por favor, ayúdenme a salvarlo”, clamó el periodista a través de las redes sociales.

El vicepresidente del Comité Cívico Potosinista, Nelson Gutiérrez, afirmó al diario El Potosí: “Creo que estamos llegando a extremos con este grupo delincuencial, hasta terroristas podríamos decirles porque se creen dueños del Cerro Rico. Eso no lo vamos a permitir los potosinos”.

“No les da derecho de estar deteriorando un símbolo patrio (la montaña del yacimiento argentífero) reconocido por la Unesco”. Según el relato del representante regional que está entre las personas agredidas, unas mil personas vinculadas a las cooperativas se volcaron a la carretera y a las faldas del cerro.