Denuncia: Casi un año sin imputados
Desde marzo de 2020 que no se sabe si imputan o sobreseen a los tres sospechosos
Ella es una adolescente de 16 años que no se siente segura en las calles de Sucre, da lo mismo si están llenas o vacías, todo el tiempo siente que alguien la persigue. Le cuesta andar tranquila y mucho más ser feliz, como cualquiera de sus amigas de la misma edad.
Su temor empezó hace cuatro años, cuando tenía 12, y se acrecentó a partir de marzo de 2020, cuando su madre presentó una denuncia por abuso sexual en contra de su esposo, padrastro de la adolescente, del hermano de su marido y de un amigo de ellos.
A casi un año de esa denuncia, el Ministerio Público no tomó una decisión sobre imputar o sobreseer a los denunciados, pese a que la ley dice que en casos de menores de edad se debe actuar con celeridad y preferencia.
Hay un informe psicológico y la víctima fue revictimizada con dos reconstrucciones adicionales y declaraciones en la Defensoría de la Niñez y Adolescencia. Su madre dice que por lo menos declaró unas seis veces. Aun así, no salió ninguna imputación.
LOS HECHOS
Según el testimonio de la víctima, ella comenzó a ser ultrajada cuando tenía 12 años. Primero fue su padrastro, cuando se quedó a dormir sola con él, que la convenció de dormir juntos y le hizo toques impúdicos. Al volver su madre quiso contarle, pero no se animó.
Después ocurrieron otras dos agresiones y una más en Potosí, donde la besó en la boca. “Yo sentí asco”, cuenta.
Cuando ella tenía 14 hubo un nuevo ataque, pero esta vez de parte del hermano de su padrastro y del amigo de este. Una medianoche el hermano del padrastro ingresó a su cuarto y le propuso que se prostituyera con su amigo. “Es un buen cliente, deberías aceptar”, le dijo.
Por el relato de la víctima, ella se opuso pero inmediatamente ingresó el otro hombre y el hermano de su padrastro salió. Al cerrarse la puerta, el sujeto la manoseó. El agresor, al retirarse, le dejó sobre la cama Bs 200.
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