Denuncian retardación de justicia por un abuso

Una madre cuyas hijas fueron víctimas de abuso sexual de parte del padre dijo sentirse “desesperada” porque su exesposo y agresor a inicios de la pandemia del coronavirus, en 2020, dejó la cárcel San Roque para pasar a detención domiciliaria y ahora busca extinguir el caso por duración del proceso. Asimismo, denunció retardación de justicia porque este caso lleva cinco años y cinco meses sin resolverse, pese a que las víctimas son mujeres: una adolescente y una joven.

Sin embargo, sostiene que el temor no solo es de ella sino también de su hija mayor quien desde que reveló en 2016 que fue víctima de abuso sexual se deterioró su salud mental, por lo que tuvo que ser internada en el Instituto Psiquiátrico Gregorio Pacheco. 

La madre contó que la condición de su hija mayor empeoró en los dos últimos años porque vive con el constante temor de que su padre podría atacarla en cualquier momento conociendo que ya no está en la cárcel. 

La víctima tiene 25 años, era estudiante de la carrera de Medicina, pero ya nada de aquello queda, pues ahora vive permanentemente sedada para controlar sus ataques de ansiedad.

Esta joven fue atacada por su padre cuando tenía 12 años en su natal Potosí, pero también cuando se vino a vivir a Sucre con su hermana menor. Actualmente el acusado busca la extinción de la acción penal por duración máxima del proceso en una Sala Constitucional, acción que se resolverá hoy, jueves.