Cruz, el asesino de Adelita, está en la cárcel de nuevo
Un juez tomó esa decisión porque el reo no alcanzó a demostrar que tenía trabajo

Vidal Cruz, el hombre que asesinó a Adelita, su pareja, nuevamente fue recluido en la cárcel San Roque debido a que no cumplió un requisito para sostener el beneficio de la libertad condicional, del que gozaba hace tres años y un mes. Por su parte, su familia mostró su rechazo a esta disposición argumentando que una persona de la tercera edad, con el antecedente de esta presa y sin una mano, no puede conseguir trabajo.
El crimen de Adela Cárdenas ocurrió el 12 de noviembre de 1996 en el municipio de Yotala y consternó a la ciudadanía, además, por la forma cómo su pareja cometió el hecho. En ese entonces, la víctima, después conocida como Adelita, sostenía un pleito con su esposo por el pago de pensiones para la manutención de sus ocho hijos. Cruz fue condenado a 30 años de cárcel que los empezó a cumplir desde ese mismo mes y ese mismo año.
El 17 de mayo de 2019, Cruz recobró su libertad pero condiciones, luego de haber cumplido 23 años de presidio en la cárcel San Roque de Sucre donde por varios años fue representante de los privados de libertad en el Pabellón Población. Una de esas condiciones fue acreditar una fuente laboral estable algo que no cumplió.
El juez de Ejecución Penal de Sucre, Luis Rojas, informó ayer, lunes, que Cruz está recluido nuevamente en el penal San Roque porque “no cumplió una de las condiciones de las reglas de conducta que le impusieron al momento de concederle este beneficio: No acredito una actividad laboral lícita”.
Esta situación fue evidenciada por el fiscal Mario Durán, quien solicitó la revocatoria de la medida de libertad condicional y, en audiencia, al haberse constatado que, efectivamente, no cumplió con ese mandato “se ha emitido la respectiva resolución disponiendo la revocatoria de la libertad condicional concedida a Cruz”, manifestó la autoridad jurisdiccional.
En ese sentido, la mañana del pasado viernes, Cruz fue aprehendido y conducido al penal San Roque, donde deberá cumplir el resto de su condena que es de 30 años de presidio.
Rojas recalcó que “no es posible que vuelva a solicitar este beneficio (de la libertad condicional) sino debe someterse a esta reclusión hasta el cumplimiento que se le impuso”.
Por su parte, una de las hijas de Cruz informó que su padre fue aprehendido cuando fue a cumplir con su obligación de firmar a la Fiscalía, cada 1 de mes y sin que siquiera sepan sus familiares fue llevado a San Roque. Allí fue destinado al P-4, donde permanece aislado “en el calabozo”. Se quejó porque la Policía no dejó a sus hijos visitar a su padre y menos que le fueran entregadas unas frazadas para protegerse del frío.
Adelita, alma venerada por sus milagros
Adela Cárdenas, popularmente conocida como Adelita, fue una joven madre de ocho hijos victimada por su esposo con golpes de piedra, quien después de quitarle la vida cercenó su cuerpo y lo quemó en un sector descampado en la comunidad de Totacoa cerca de la población de Yotala.
Esta muerte cruel provocó una devoción inusitada hacia el alma de Adela que comenzó con la visita de personas al lugar donde fue asesinada y donde sus seguidores levantaron una ermita.
No se puede decir a partir de cuándo comenzó esta devoción, pero es un hecho que Adelita es una de las almas más visitadas todos los lunes para pedirle que les conceda algún milagro. Ese lugar permanente está lleno de flores y velas.
Hijos consideran que se reabrieron las heridas
Una de las hijas de Vidal Cruz protestó contra la decisión de la justicia de ordenar nuevamente la reclusión de su padre sin considerar que, como familia, durante todos estos años han intentado cerrar esta herida por el asesinato de su madre.
Explicó que el regreso de su padre a la cárcel vuelve a abrir esta herida, pues más allá de todo lo ocurrido ellos tienen un padre con quien no perdieron su relación de hijos e, incluso, ayudaron económicamente a su progenitor para que salga de la cárcel. En el último actuado judicial gastaron Bs 21 mil que lo obtuvieron de un préstamo bancario.
Asimismo, cuestionó que, cómo es posible que la justicia pretenda exigir un trabajo fijo a una persona de la tercera edad (Cruz tiene 66 años) que tiene entre sus antecedentes haber estado en la cárcel y no tener una mano.
Dijo que su padre desde que salió de la cárcel estuvo viviendo con sus tres hijos en Sucre a quienes ayudó a construir su casa, que es donde estuvo trabajando regularmente.