Torrico, el “abogado del diablo” boliviano, termina excarcelado

El abogado Jhasmani Torrico, conocido por extorsionar y torturar a personas para que honren sus deudas, salió de la cárcel San Sebastián y ahora goza de detención domiciliaria, por decisión del Juzgado de Sentencia Nº2 del municipio de Quillacollo (Cochabamba).

Por el secuestro y lesiones al mecánico Antonio Cuéllar, la justicia dictó para Torrico una sentencia de seis años y seis meses de cárcel, de la que cumplió aproximadamente dos años. Además, tuvo que pagar una fianza de 80 mil bolivianos para abandonar el reclusorio.  

El gobernador del penal de San Sebastián, teniente coronel Cristhian Arce, relató que el apodado como “abogado del diablo” o “abogado torturador”, era visitado por “colegas” y habría brindado asesoramiento legal desde prisión. 

Abandonó el reclusorio el miércoles, cuando el juzgado antes mencionado ejecutó la orden de excarcelación dictada a mediados del mes pasado.   

“A partir de ayer (por el miércoles) está cumpliendo detención domiciliaria, con custodio policial y las restricciones fijadas”, agregó el gobernador del recinto penitenciario.

Ahora cumple detención domiciliaria con custodio policial, que será relevado cada 24 horas, en su domicilio ubicado en la zona Sumunpaya, en Colcapirhua. 

El abogado fue procesado y sentenciado en 2021 por el secuestro y las lesiones que le causó al mecánico Cuéllar. En enero de 2019, a través de una serie de videos, se conoció que Torrico torturaba a litigantes para resolver demandas de deudas.

En ese entonces Cuéllar denunció que esos métodos del abogado se practicaban desde 2017 y se declaró víctima del profesional en leyes.

ACUSACIÓN

Por el secuestro y lesiones al mecánico Antonio Cuéllar, la justicia dictó para Jhasmani Torrico una sentencia de seis años y seis meses de cárcel, de la que cumplió aproximadamente dos años.

El denunciante dijo temer por su seguridad con la salida dell abogado de la cárcel.