Ante las amenazas de la COB, el TSJ dice que no tiene nada pendiente sobre el caso Sacaba-Senkata
Deslindó responsabilidades a la Asamblea Legislativa sobre la autorización del juicio de corte a Jeanine Áñez
Tras las advertencias de la Central Obrera Boliviana (COB) de tomar el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), su presidente Ricardo Torres ratificó este jueves que la Sala Plena de esta instancia no tiene nada pendiente sobre los hechos de Sacaba y Senkata en noviembre de 2019.
“El Tribunal Supremo, en su Sala Plena, no tiene nada pendiente en relación al caso mencionado Senkata-Sacaba. Nosotros somos una instancia de casación en la vía ordinaria y, a través de esta vía, en la sala penal, no se tiene nada ingresado ni registrado en relación a este caso”, indicó Torres en un contacto con periodistas en Sucre.
Sin embargo, aclaró que sobre este caso, el TSJ recibió un requerimiento acusatorio del Ministerio Público, que fue remitido a la Asamblea Legislativa Plurinacional para la autorización del juicio de responsabilidades contra la expresidenta Jeanine Áñez acusada por los hechos violentos de 2019.
Agregó que como la Asamblea todavía no autorizó este proceso con el voto de dos tercios de sus miembros, el TSJ “no puede ejercer ninguna acción jurisdiccional en este caso, porque en los hechos, no existe un juicio de responsabilidades por el caso Sacaba-Senkata”.
Torres también se refirió a un proceso ordinario en La Paz y una consulta al Tribunal Constitucional Plurinacional sobre este caso, pero recalcó que si existen observaciones a estos trámites, deben “dirigirse a las instancias competentes”.
“No tenemos la potestad disciplinaria de fiscalizar los juzgados ordinarios, esa facultad está reservada para el Consejo de la Magistratura”, enfatizó.
La autoridad máxima de la justicia afirmó que si bien respetan el derecho a la protesta, no comparten las acciones violentas y arbitrarias que puedan dañar la democracia y la institucionalidad del Estado boliviano.
La COB amenazó el martes con llegar a Sucre en una “gran marcha” para tomar el TSJ por un “montón de denuncias”, entre ellas por los conflictos sociales de noviembre de 2019 que, según su dirigencia, el Órgano Judicial hasta ahora no responde.