Amplían a otros seis meses la detención del tatuador acusado de asesinato

Al tatuador acusado de asesinar a Marco Antonio Jiménez, de 33 años, la noche del 24 de mayo de este año en la plazuela Camargo, le ampliaron por otros seis meses su detención preventiva en la cárcel San Roque.

Ayer, jueves, se desarrolló una audiencia en la que la defensa del presunto asesino, de iniciales L.A.J., pretendía lograr la libertad del imputado al haberse cumplido los seis meses de su detención preventiva, según informó el abogado de la familia de la víctima, Sergio Vildozo. El atacante, de oficio tatuador, fue encarcelado el 8 de junio.

Vildozo contó que después de que el sospechoso fue encarcelado, su defensa cambió la versión que él había brindado inicialmente. Según la Policía, llegó a admitir el crimen.

Este jueves, la defensa, para lograr la libertad del tatuador, argumentó que no hay pruebas que lo incriminen, pues las imágenes de las cámaras de seguridad, más allá de situarlo en inmediaciones del lugar de los hechos, no determina que efectivamente él fue el autor.

Esto demuestra que el supuesto asesino no quiere asumir su responsabilidad, manifestó Vildozo. Incluso se encontró una carta de premonición de un suicidio en la que el joven se despedía de sus familiares, aunque no admitía haber asesinado a persona alguna.

Sin embargo, un juez determinó que el acusado debe continuar privado de libertad otros seis meses, mientras se desarrolla el juicio que, a criterio de Vildozo, podría recién comenzar la segunda quincena de febrero de 2023.

La noche del 24 de mayo, Jiménez estaba sentado en un banco de la mencionada plazuela, luego de haber participado de un desfile, cuando fue atacado por un desconocido, presuntamente L.A.J., con un arma punzocortante y murió. El móvil del hecho no fue robo sino un ataque intempestivo, aparentemente, sin motivo alguno.