Policía: Se alteró el lugar del accidente de los cadetes en La Paz
La Policía informó este jueves que alguien retiró varios elementos de la torre del Colegio Militar del Ejército “Cnl. Gualberto Villarroel”, donde el martes se produjo un accidente con dos cadetes heridos de gravedad, antes de la llegada de los investigadores.
La Policía informó este jueves que alguien retiró varios elementos de la torre del Colegio Militar del Ejército “Cnl. Gualberto Villarroel”, donde el martes se produjo un accidente con dos cadetes heridos de gravedad, antes de la llegada de los investigadores.
El martes los cadetes terminaron gravemente heridos tras ejecutar el “salto de la muerte”, un ejercicio acrobático en una torre de al menos 20 metros.
Los dos militares de cuarto año fueron trasladados de emergencia hasta la Clínica del Sur, donde tuvieron que ser estabilizados. Se conoce que ambos sufrieron múltiples fracturas y uno de ellos fue intubado porque cayó de cabeza.
Tras el accidente, la Policía y la Fiscalía ejecutan una investigación conjunta para identificar a los posibles responsables por el fallo en la maniobra de alto riesgo.
“Llegamos al lugar del hecho y lamentablemente, debemos manifestar que estaba alterado, ya no se encontraban las cuerdas y se habían recogido las colchonetas y todos los elementos cuando se realizó el ejercicio”, informó el director de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc) de la zona sur, Roberto Valencia, en Unitel.
Las autoridades exigieron a los militares que presenten todos los elementos que estaban en el lugar, y tuvieron que ser repuestos y secuestrados con fines investigativos.
El oficial indicó que también pudieron recoger una cámara que tenía uno de los cadetes en el casco. Ese elemento servirá para revisar el registro audiovisual del momento en que se ejecutó la maniobra.
Mientras, tanto, el estado de salud de ambos, hasta anoche, era crítico pues se conoce que ambos sufrieron múltiples fracturas y uno de ellos fue intubado porque cayó de cabeza.
Finalmente, aseveró que los comandantes de las Fuerzas Amadas, Hugo Arandia, y del Ejército, Juan José Zúñiga, en actitudes “indolentes”, incurrieron en omisión de socorro porque no actuaron de forma oportuna para auxiliar a las víctimas.