Falsificó documentos y la firma de la Ministra de Trabajo para dirigente sindicales
El acusado de estafa fue enviado a la cárcel; engañó a sindicatos de Cochabamba, pero no se descarta que haya operado a nivel nacional
La justicia envió a la cárcel a un hombre que se dedicaba a la falsificación de documentos del Ministerio de Trabajo para la posesión de directorios sindicales en Cochabamba.
En una audiencia de medidas cautelares, el Juez de Instrucción Penal de turno de Quillacollo determinó la detención preventiva de J.C.S.Q. en la cárcel de San Pablo de este municipio cochabambino.
El hombre es acusado de “estafa con agravante en caso de víctimas múltiples, falsedad material, falsificación de sellos, papel sellado y timbres, ejercicio indebido de la profesión abogacía y mandato indebido”, según detalla una nota institucional del Ministerio de Trabajo.
La jefa departamental de Trabajo de Cochabamba, Sintia Lozada, detalló que el imputado favorecía a la posesión de directorios sindicales, particularmente del sector de fotógrafos de Quillacollo, Sipe Sipe y Colcapirhua, entre otros municipios.
Para cometer el delito, llegó a falsificar hojas membretadas del Ministerio de Trabajo, además del sello y firma de la Ministra de Trabajo, Verónica Navia. Hasta el momento fueron identificados ocho sindicatos estafados, pero no se descarta que el acusado haya operado a nivel nacional.
Aparentemente esta persona, que se hacía pasar por abogado, realizaba sus trámites fraudulentos desde La Paz y tenía contactos con dirigentes sindicales de los fotógrafos, con quienes habría operado, pero aún no se conoce con exactitud quienes eran parte de este ilícito.
Las víctimas de esta estafa denunciaron que el sindicado cobraba entre 2.000 y 2.500 bolivianos por trámite para que los directorios sindicales obtengan su Resolución Ministerial que les permitía obtener su personería jurídica.
La Directora departamental de Trabajo explicó que para realizar cualquier trámite en esta Cartera de Estado no es necesario contar con la asistencia de un abogado, en virtud a que la jefatura dispone de inspectores laborales y personal capacitado para orientar a la o el trabajador.