Hombre viola y mata a hijastra discapacitada
La madre le había pedido que la cuidara mientras salía a trabajar, en Cochabamba
Tamy, una niña discapacitada de dos años y diez meses, terminó muerta luego de sufrir cinco horas de agonía. Su padrastro, Romario Soria, de 23 años, primero la violó, después la golpeó y, finalmente, la mató. Tenía el encargo de cuidarla mientras la madre de la pequeña salía a trabajar a una pensión.
El hecho, que conmociona al país, ocurrió en la localidad de Thaqo, municipio de Punata, en el Valle Alto cochabambino, el pasado jueves.
Ese día, la madre dejó a Tamy, su hija discapacitada, encerrada, sola, en su habitación, pero encargando a su concubino –con quien convivía hace siete meses– que él la cuidara entre las 17:00 y las 19:00, informó la fiscal de Punata, Amanda Medrano.
Cuando la mujer regresó a la casa donde vivía en alquiler a las 18:30, en su habitación encontró a su concubino y a su hija inconsciente. La pequeña, además, tenía sangre en la boca. Preguntó a Romario qué había sucedido con ella y le contestó que no sabía.
Enseguida, la madre de Tamy se percató de que su hija también presentaba sangre en sus pañales y la llevó al hospital Manuel Ascencio Villarroel, de Punata, donde la menor ingresó en estado crítico.
Allí, la niña permaneció, agonizando, durante cinco horas y después falleció.
Una tía de la niña reveló que Tamy era discapacitada, no podía moverse y solo tenía que estar en la cama echada. Recibía alimentación asistida y permanentemente utilizaba pañales.
CAUSA DE LA MUERTE
El fiscal departamental de Cochabamba, Osvaldo Tejerina, informó que Tamy murió a consecuencia de la compresión de centros nerviosos superiores, hematoma subdural, traumatismo craneoencefálico cerrado, policontusión y trauma genital.
Esto demuestra que fue brutalmente violada y golpeada por Romario, quien resultó aprehendido el mismo jueves, cuando también reconoció que él había cometido el crimen.
SENTENCIA
Un día después, el viernes, Romario Soria se sometió a un juicio abreviado por el delito de violación de infante, niña, niño o adolescente e infanticidio.
El juez a cargo del Juzgado Público Mixto, Civil, Comercial e Instrucción Penal N°1 de Anzaldo lo condenó a 30 años de presidio, sin derecho a indulto. Deberá cumplir su pena en la cárcel El Abra, de Cochabamba.
ENTIERRO
Tamy, la niña discapacitada de dos años y diez meses violada y luego asesinada, fue enterrada este sábado en el Cementerio General de Cochabamba en medio de profunda consternación de la población.