Estudio: Exportar cocaína mueve $us 2.880 millones
Carlos Arze cuestiona que el Gobierno ignore otros actores del narcotráfico con la tesis del ‘país tránsito’
Los ingresos por exportación de cocaína en Bolivia rondan entre 1.843 millones y 2.880 millones de dólares, dependiendo del precio de comercialización en frontera, según un estudio plasmado en el libro “Economía del narcotráfico: desinstitucionalización y políticas en Bolivia”, del investigador Carlos Arze, quien apunta que otras “economías a la sombra” son el contrabando y la minería ilegal.
Durante la presentación del libro realizada la tarde-noche del martes, en La Paz, el investigador del Centro de Estudios para el Desarrollo Laboral y Agrario (Cedla) remarcó que la cocaína se valoriza apenas cruza la frontera, lo que ha supuesto un crecimiento de su producción y venta.
En el exterior, un kilo de cocaína puede llegar a venderse en $us 30.000, mientras que los precios locales van de $us 2.500 a 2.600.
Un dato a tomar en cuenta: los $us 1.843 millones y $us 2.880 millones que mueve la venta de la droga fuera del país suponen un 26% y un 41,3%, respectivamente, de las exportaciones legales registradas en 2020, que sumaron $us 6.974 millones, de acuerdo con la misma fuente.
Arze afirma que los eslabones nacionales vinculados a la producción y al tráfico de cocaína podrían obtener ingresos por $us 835 millones, que estarían circulando en el país.
Ve “un capitalismo salvaje que combina la presencia de capital extranjero en sectores estratégicos con el empoderamiento de clases rentistas”. Se refiere así a sectores sociales que forman parte de la base social del MAS.
¿‘PAÍS TRÁNSITO’ Y CÁRTELES?
El Gobierno sostiene que Bolivia es un ‘país tránsito’ en el negocio del narcotráfico que ha ido creciendo a nivel global. Esta tesis omite que en territorio nacional se produce coca y se refina pasta proveniente de Perú, afirma el investigador.
Ante la negativa del Ejecutivo respecto a la presencia de cárteles, señala que, en cambio, sí hay otros actores más invisibles que prestan servicios –por ejemplo, el transporte en avioneta desde las fronteras– y pueden quedarse, entre todos, hasta con un 20% de los montos señalados.
“Se sigue pensando en el cartel, que tenía dominio territorial, y ya no en estos nuevos actores más ágiles que brindan servicios”, reflexionó en el acto.
CAUSAS Y SALIDAS
La investigación identifica como causas de esta situación a las políticas implementadas por el Movimiento al Socialismo (MAS) desde el 2006, entre ellas, la Ley de la Coca aprobada en 2017 que elevó en 83% la extensión de las zonas autorizadas para el cultivo de coca. Se pasó de 12.000 hectáreas a 22.000: 7.700 en el trópico de Cochabamba y 2.300 en los Yungas de La Paz.
Según datos de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (Unodc), entre 2006 y 2023, el 93% de la coca producida en el Chapare y el 19% de lo producido en los Yungas no se comercializó en el mercado legal.
El estudio concluye que el Estado tuvo “un rotundo fracaso” en su intento por abordar el problema del narcotráfico en Bolivia, tanto en la interdicción como en los proyectos de desarrollo alternativo, y señala la ineficacia y la corrupción, además de un “empoderamiento de las élites sindicales en las regiones productoras, exacerbando la situación”.
El investigador apunta que si bien la legalización de las drogas ya tiene una historia con efectos positivos en otros países, Bolivia no podría avanzar sola hacia ese camino ante su debilidad institucional. Llama a reflexionar sobre la pobreza y la falta de oportunidades que llevan a grupos locales a incorporarse al negocio de las drogas, vinculando esto con la “informalidad dominante en todos los aspectos de la economía”. Por tanto, dice Arze, el conflicto debe ser abordado desde la economía, sin olvidar la “política rentista con ciertos sectores que son la base social de este régimen”.
Esta investigación se basa fundamentalmente en fuentes secundarias y sistematiza “la información que de manera muy libre, a veces irresponsable, genera opiniones bastante alejadas de la realidad y muy cargadas de esta polarización política”, según el autor. Parte de preguntarse qué está detrás de la estabilidad aparente en Bolivia, lo que lleva a identificar “economías en la sombra”. Aunque el contrabando y la minería ilegal del oro fueron identificadas como tales, el trabajo se concentró en el narcotráfico.
Una investigación anterior de Manuel Morales, vocero del Comité Nacional de Defensa de la Democracia (Conade), también explora el movimiento económico que genera el narcotráfico sobre informes oficiales del tema, tal como este estudio del Cedla.
GASOLINA
Por cada kilo de pasta se utilizaría 240, 250 litros de gasolina, cantidad considerable tomando en cuenta la escasez actual. “Es un volumen enorme de combustible subvencionado”, consideró Carlos Arze.
¿Y ECUADOR?
Carlos Arze
INVESTIGADOR
“Un país con una debilidad enorme institucional como fue la del Ecuador, nos está mostrando un poco un futuro que podría ser el nuestro”.
EN JAQUE
Manuel Morales
Experto
Pone en jaque al Gobierno porque estos datos estarían señalando que hay una inyección de dólares del sector ilegal e informal del narcotráfico desde hace muchos años atrás.”.