4 nietos viven gracias a su abuelita
Se hizo cargo de sus nietos en La Paz porque murió el papá y la mamá es alcohólica
Doña Cristina Cardozo es una abuelita de 95 años de edad que trabaja todos los días para sacar adelante a sus cuatro nietos: Juan de Dios (14), Pamela (11), Carla (6) y Marcos (5), quienes están a su cargo luego de que el papá falleciera y la mamá se volviera alcohólica.
Cristina, que llegó hace 15 años a la Sede de Gobierno desde Llallagua (Potosí), relata que para llevar un pan para sus nietos debe realizar diferentes actividades, entre ellas lavar ropa ajena, y cuando no tiene encargos va a los mercados y pensiones a pelar papa, por una arroba recibe 10 bolivianos, monto que es insuficiente para la alimentación y educación de sus nietos.
A veces, no consigue trabajo y se ve obligada a deambular por los mercados para pedir colaboración a las vendedoras y así cocinar para sus nietos, que también asisten a la escuela.
Los niños también trabajan lavando platos a cambio de monedas o un plato de comida.
A la mujer lo que más le preocupa por su edad es la situación de sus nietos; dice que su salud se deteriora con el pasar de los días, pero no quiere darse por vencida por sus "wawas" que, por ahora, no tienen a nadie más que a ella.
Según cuenta, la mamá de los pequeños se dedicó a beber alcohol luego del fallecimiento de su pareja, sin embargo, la Defensoría de la Niñez le advirtió con quitarle a sus hijos y fue así que decidió ingresar a un centro de rehabilitación para recuperarse.
Doña Cristina, con lágrimas en los ojos, recuerda que desde que se hizo cargo de sus nietos pasó muchas dificultades e incluso asegura que hay días en que no comen por falta de dinero.
"Ayúdenme por favor, mis nietos no tienen nada para comer (...) A veces salgo con mis nietos a buscar en los mercados o lavar platos, nos regalan verduritas, carnes a veces nos pagan por pelar papa. Por favor ayúdenme", pide Cristina.
Una de sus nietas cuenta que muchas veces fue discriminada en su colegio por llevar los zapatos muy gastados o por no tener material escolar.
"Con ropa viejita vamos a la escuela. Nos dicen que somos pobres, que no llevamos materiales ni pelota. Nos insultan", afirma.
El grupo Ayuda en Acción inició una campaña de solidaridad para esta familia en La Paz.