Día de Difuntos: Entre ofrendas, música, oraciones y gastronomía
En diferentes regiones del país, la celebración tuvo, como cada año, una participación importante de la población católica
Miles de personas despidieron ayer las almas de sus difuntos rodeados de la familia, música, oraciones y comida como manda la tradición de la celebración de Todos Santos.
La creencia en esta celebración es que las almas de los difuntos llegan a los hogares cada 1 de noviembre a mediodía para visitar a sus familiares y luego son despedidas en medio de rezos el 2 de noviembre que es festivo en el país.
Es por ello que la gente se trasladó a distintos camposantos de Bolivia para "despachar" a sus difuntos, agradeciendo la visita del "ajayu", alma en aymara, de sus familiares.
"Todo lo que hemos puesto en la casa como los pancitos, la fruta, la comida hemos traído al cementerio y le hemos despachado para que retorne con Dios y que vuelva al año a visitarnos", comentó Ramiro Choque que despidió el alma de su suegro.
El Cementerio General de La Paz se abarrotó de gente que llevaba platos de comida y panes especiales para esta fecha conocidos como "t'ant'awawas" o niño de pan en aymara por su forma de persona en pequeño para así despedir el alma de sus allegados.
Según la creencia, los panes en forma de escaleras o caballos como también las cañas de azúcar ayudan a las almas a retornar con mayor facilidad al cielo.
También es muy importante rezar a mediodía para que "el alma encuentre el camino", según Choque, por lo que muchas personas ofrecen rezar en el nicho del difunto a cambio de panes y comida.
Además muchos familiares contratan a músicos para "amenizar" el despacho de las almas de este mundo.
"Siempre (mi suegro) nos decía que tenemos que estar alegres, no quería que estemos tristes, eso nos decía en vida, entonces amenizamos con un poco de música para que sienta que en la tierra nos acordamos", explicó Choque.
Después de rezar y despedir al mediodía a las almas visitantes, los familiares comparten un plato de comida y las masas ofrendadas al difunto.
Cientos de personas visitaron los cementerios en Cochabamba para despedir a las almas de sus seres queridos con el tradicional volcado de mesa.
En Valle Hermoso varias familias armaron los denominados "mast'akus", en las que destacaron las tradicionales t'antawawas en diferentes formas y tamaños; además de bizcochos, suspiros, dulces, flores, bebidas y alimentos.
En Santa Cruz, la gente se volcó a los cementerios y entre ritos, cantos y rezos pasaron gran parte de la mañana velando a sus familiares fallecidos en una jornada que comenzó con lluvia.
De acuerdo con informes del director de Cementerios Ronald Romero, ayer no se registraron mayores incidentes salvo que uno u otro decomiso de alcohol.
Entretanto, en el cementerio de la ciudad de Oruro la tumba más visitada en estos días fue la de Inocencia Flores, conocida como la 'Santa Popular', donde acuden miles de creyentes a dejarle flores, velas u otros objetos en señal de agradecimiento por los favores brindados.