Inmunólogo: “Todo el mundo quisiera que haya algo que salve”
El docente e investigador Roger Carvajal advirtió de los riesgos de consumir dióxido de cloro
El inmunólogo, docente e investigador Roger Carvajal advirtió de los riesgos de consumir dióxido de cloro, ante la difusión de su uso en pacientes de coronavirus por parte de algunos médicos y ante la identificación por parte del Comité Científico Nacional covid-19 de al menos ocho efectos secundarios del uso de dióxido de cloro.
En una entrevista en el programa “Redacción Central” de Correo del Sur Radio, este lunes, explicó que el dióxido de cloro es un gas que se disuelve en el agua para tratarla porque mata microbios y bacterias; también sirve para hacer limpieza de cañería o blanquear papel y madera, entre otros usos.
En una videollamada desde La Paz, admitió que en otros países se usa para consumo humano en cantidades mínimas, de 0,8 miligramos por litro de agua, por lo que no tiene efectos; lo que sí podría ocurrir en Bolivia por las dosis que se están planteando, advirtió.
El también miembro del Comité Científico que asesora al Ministerio de Salud, apuntó que en una entrevista, uno de los defensores del uso del dióxido de cloro mostró un artículo científico que salió en Hungría. Él lo buscó y constató que el documento habla de este producto solo como desinfectante en el agua y de la posibilidad de hacer una experimentación previa para ver si se puede usar en gárgaras, pero nada más.
“Como máximo, hay gente que dijo que se puede utilizar en la pasta de dientes, enjuagues bucales o gárgaras, pero no pasa de eso. El administrar y hacer que la gente ingiera esto, tiene sus riesgos. Si bien las dosis parecen no ser muy altas, pero como son crecientes y acumulativas, puede causar efectos tóxicos”, entre vómitos, diarrea, baja de la cantidad de líquidos en el organismo, inclusive falla hepática, agregó.
Respondiendo a los argumentos de los defensores del uso del dióxido de cloro, dijo que la sangre no se oxigena por esa vía y que esta sustancia tampoco oxida lípidos; tampoco puede ser cierto que modifica el PH, además de no ser un medicamento porque no tiene autorización ni registro.
“No podemos fiarnos de algo que no tiene mayor sentido en términos de fisiopatología médica ni de bioquímica”, insistió el inmunólogo Carvajal al sostener que si hay gente que da fe de resultados es porque hay un efecto placebo.
“Todo el mundo quisiera que haya algo que salve”, afirmó.
Revisa la entrevista en la que también se refirió a si Bolivia está preparada o no para la etapa de rápido ascenso del contagio; a la fase de transmisión sostenida de la pandemia y a recomendaciones ante el retorno del transporte público a las calles.