Resurge polémica por el uso de ivermectina contra el covid-19 por falta de evidencia científica
El jueves Merck, el laboratorio estadounidense que descubrió el medicamento, advirtió que "no hay base científica acerca de un potencial efecto terapéutico" de la ivermectina contra el coronavirus establecido en estudios preclínicos
No es la primera vez que Merck Sharp & Dhome (MSD), el laboratorio estadounidense que descubrió este medicamento, desaconseja el uso de la popular ivermectina para el tratamiento contra el covid-19 por falta de evidencia científica. Ya el año pasado lo hizo mediante un comunicado.
"No hay base científica acerca de un potencial efecto terapéutico", aclaró Merck, en un nuevo comunicado, el jueves pasado. Se refirió así al uso de la ivermectina en estudios preclínicos por la enfermedad que ha extendido una pandemia en prácticamente todo el mundo.
"No creemos que los datos disponibles respalden la seguridad y eficacia de la ivermectina", señalaron los científicos de la compañía con sede en Nueva Jersey a través de un comunicado de prensa. Según explicaron, ellos "continúan examinando cuidadosamente los hallazgos de todos los estudios disponibles y emergentes de ivermectina para el tratamiento de covid-19, en busca de evidencia de eficacia y seguridad".
En Bolivia, hace varios meses que el uso de la ivermectina forma parte del tratamiento de los pacientes que contrajeron el nuevo coronavirus.
LA POSTURA DE MERCK
En su comunicado, Merck reiteró su postura de que no existe una base científica del potencial efecto terapéutico de la ivermectina contra el covid-19, señaló que no hay evidencia "significativa" de eficacia clínica del medicamento suministrado a pacientes con la enfermedad, y, finalmente, enfatizó en la "preocupante" falta de seguridad de datos en la mayoría de los estudios sobre ivermectina y covid-19.
LA POSTURA DE LA OMS
La Organización Mundial de la Salud (OMS), por su parte, dejó en claro que sigue con atención los estudios que se realizan sobre la ivermectina como potencial tratamiento contra el covid-19 y que fijará una posición al respecto en las próximas semanas.
"No hemos dado una recomendación para el uso de la ivermectina, pero estamos siguiendo con atención las investigaciones que se están realizando y que han mostrado algunos resultados prometedores", dijo a la prensa la jefa de la célula técnica anticovid de la OMS, María Von Kerkhove.
LA IVERMECTINA EN BOLIVIA
El 12 de mayo de 2020 la ivermectina fue incluida, mediante la Resolución No. 259, en la ‘Lista Nacional de Medicamentos Esenciales 2018-2020’. Desde entonces el Ministerio de Salud autorizó su uso para el tratamiento de pacientes con coronavirus (covid-19), bajo protocolo médico y consentimiento informado.
“(Ahora) vamos a poder tener la posibilidad de la importación y el uso en diferentes dosis de este producto con la aclaración que es un producto que no tiene una validación científica en el tratamiento del coronavirus”, remarcó aquel día el ahora exministro de Salud Marcelo Navajas en una conferencia de prensa ofrecida en la ciudad de La Paz.
NO ESTÁ DEMOSTRADA CIENTÍFICAMENTE
El 14 de enero pasado, una nota de la agencia francesa AFP firmada por Julie Charpentrat advertía lo siguiente:
Muchas publicaciones compartidas en las redes sociales en el mundo presentan la ivermectina, un medicamento antiparasitario, como un tratamiento útil contra el covid-19, e incluso como un remedio "milagro". Pero hasta ahora su eficacia no se ha demostrado, explicaron varios expertos e instituciones.
La ivermectina es un medicamento barato para uso veterinario y humano utilizado contra parásitos, como la sarna, la oncocercosis y los piojos.
Sin embargo, si bien un estudio australiano publicado en abril de 2020 observó una eficacia in vitro (en laboratorio) de la invermectina contra el virus SARS-CoV-2, esta no está demostrada en el hombre, puesto que hasta ahora los ensayos fueron limitados y con muchos sesgos.
Además, muy a menudo los tratamientos in vitro no pueden trasladarse al ser humano, especialmente porque no pueden administrarse las mismas concentraciones de medicamentos.
"El 'medicamento milagro' ivermectina. No es tóxico. Creo que es un don de Dios para salvar la raza humana del covid-19", afirma por ejemplo una publicación en coreano en Facebook, parecida a las que también circulan en países como Brasil y Sudáfrica.
En Estados Unidos, médicos reunidos en un grupo llamado "Front line COVID-19 Critical Care Alliance" defienden con ahínco este medicamento. Su máximo responsable, el doctor Pierre Kory, aseguró incluso en diciembre que su eficacia había sido probada ante una comisión del Senado estadounidense.
En Francia, un sitio internet que promueve terapias llamadas alternativas y fuente de falsas informaciones afirmó por su parte el mes pasado que "todas las pruebas científicas muestran la eficacia de la ivermectina".
FUERTE ECO EN AMÉRICA LATINA
Este tipo de afirmaciones proliferaron especialmente en los últimos meses en América Latina, hasta el punto de que la AFP publicó varios artículos sobre el asunto en español y portugués, mostrando que no se trataba de un tratamiento probado contra el covid-19.
El 5 de enero, el presidente brasileño Jair Bolsonaro, que ya había promovido la hidroxicloroquina como medicamento eficaz contra el covid-19, defendió el uso de la ivermectina en Twitter.
La hidroxicloroquina es también un medicamento antiparasitario promovido al principio de la pandemia igualmente por otros dirigentes como Donald Trump, pero cuya eficacia tampoco fue probada por la ciencia.
Para apoyar ambos medicamentos se emplea a menudo la misma retórica en las redes sociales, según la cual las autoridades los ignoran porque son baratos y por tanto no rentables para la industria farmacéutica.
ESTUDIOS "POCO CONCLUYENTES"
En Francia, los políticos euroescépticos Nicolas Dupont-Aignan, François Asselineau y Florian Philippot reclamaron la semana pasada al ministro de Sanidad, Olivier Véran, información sobre los tratamientos posibles del covid-19, citando la hidroxicloroquina, la vitamina D y la ivermectina.
En realidad, "la mayoría de estudios clínicos (publicados) recientemente sobre el tema son poco concluyentes, la mayoría son o bien prepublicaciones no validadas por colegas, o bien, cuando son publicados, se trata de estudios con sesgos metodológicos de manera que los resultados son difícilmente interpretables y no permiten sacar conclusiones", resume la Sociedad Francesa de Farmacología y de Terapéutica.
La Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA), su homóloga sudafricana (SAHPRA) y las autoridades sanitarias mexicanas también afirmaron públicamente que la ivermectina no se considera como un tratamiento anticovid, debido a la falta de datos científicos fiables y sólidos.
En cuanto a Unitaid, la organización internacional de compras de medicamentos para los países pobres que vigila de cerca todo tratamiento potencial contra el covid-19, estima que hay "datos preliminares prometedores", pero que "hay que esperar los resultados de otros ensayos", antes de prever eventualmente nuevas etapas.
"Para estar seguro al 100% de la eficacia de un medicamento, hacen falta resultados de ensayos aleatorios controlados de mayor envergadura" de lo que se ha hecho hasta ahora, explica a la AFP el profesor Kim Woo-joo, profesor del departamento de enfermedades infecciosas en el hospital universitario de Corea, en Seúl.
UN ANTIPARASITARIO
La ivermectina es un medicamento antiparasitario aprobado por la Agencia Americana del Medicamento (FDA, por sus siglas en inglés), que también ha demostrado ser eficaz 'in vitro' contra una amplia gama de virus, incluidos el VIH, el dengue, la gripe y el Zika.