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Diego Rojas, joven sucrense que aspira a ser presidente

Inspiradora historia de un exalumno del colegio del Sagrado Corazón que triunfa con sus proyectos

ACTIVIDAD. El chuquisaqueño Diego Rojas Arancibia en un evento internacional. ACTIVIDAD. El chuquisaqueño Diego Rojas Arancibia en un evento internacional. Foto: Gentileza

Sucre/CORREO DEL SUR
Sociedad / 21/05/2023 07:22

Las noticias del sucrense Diego Rojas Arancibia despertaron esta semana profundos sentimientos de orgullo y esperanza en el país, tras conocerse que este estudiante de posgrado de la Universidad de Oxford, Reino Unido, fue incluido en la lista anual de la revista Poets and Quants como uno de los 100 estudiantes más brillantes del globo.

A poco de concluir su doble maestría y retornar al país, Rojas, de 32 años, compartió con CORREO DEL SUR un poco de su historia, que está marcada por el constante ideal de ampliar sus horizontes personales (creó y es gerente general de la startup “PasanaQ”, aliada con BancoSol y Quantum y conformada por nueve bolivianos, él incluido).

Entre esos horizontes está su aspiración de llegar a la presidencia de Bolivia. Tiene claro que la situación puede mejorar facilitando a las empresas privadas mejores condiciones y creando alianzas con firmas internacionales.

Por lo pronto, insta a los jóvenes bolivianos a aprender inglés lo antes posible, buscar becas y procurarse la experiencia de trabajar o vivir en el extranjero.

SU FAMILIA

CORREO DEL SUR (CS). ¿Tus padres son sucrenses?

Diego Rojas (DR). Mi papá es sucrense y toda su familia es sucrense, pero mi mamá es camireña. Mis papás se conocieron en Sucre cuando mi mamá fue a estudiar a la Universidad.

CS. ¿Hasta qué edad viviste en Sucre y en qué colegio estudiaste?

DR. Yo nací y crecí en Sucre, estudié en el colegio Sagrado Corazón. Salí bachiller en Sucre y, bueno, por consejos de mis papás me fui a hacer la Universidad en La Paz; primero, porque no existía mi carrera en Sucre: estudié Ingeniería Mecatrónica y, segundo, porque mis papás siempre me incentivaron a buscar becas para especializarme y me dijeron que en La Paz estaban todas las embajadas, que iba a ser mucho más fácil para mí para, eventualmente, estudiar una maestría fuera. Entonces me fui a La Paz hace 18 años y estuve hasta los 25 años.

CS. ¿Crees que hay un buen nivel en la educación que se imparte en Sucre?

DR. Yo creo que en Sucre sí, hubo un nivel interesante de educación, principalmente en el Sagrado; creo que nos prepararon muy bien, lo único que sí no nos prepararon fue en el inglés y, bueno, ahí mis papás hicieron un esfuerzo extra para ponerme en el CBA desde los 13 años. Gracias a ellos y gracias a Dios pude aprender inglés, que para mí fue esencial para poder hacer una maestría en Estados Unidos (estudió una maestría en Energías Renovables gracias a la beca Fullbright, de la Embajada estadounidense; luego, tomó una doble maestría en Oxford, Reino Unido).

CS. ¿Cuáles eran tus aficiones en la infancia?

DR. Me encantaba jugar fútbol; era algo que amaba y mis papás me pusieron en distintas actividades: me pusieron en gimnasia, natación, fútbol, dibujo, guitarra...

CS. ¿Cómo obtuviste tu primera beca?

DR. Mi primera beca no fue la primera a la que postulé, la primera fue porque mi papá me incentivó a postular en la prepromoción en Sucre y me ayudó con toda la preparación, currículum, carta de motivación… Una beca ofrecida por la Embajada de Estados Unidos, que era para ir a la NASA durante una semana, y llegué a la final, pero quedé como suplente. Me dolió no ganar la beca, pero estuve cerca de ganarla y desde entonces me quedó la chispa de seguir aplicando a becas.

La segunda vez que apliqué, tampoco la gané. Apliqué a una beca de pregrado con el gobierno chino y no me salió. La primera beca que gané fue porque mis papás, que no tenían suficiente dinero para pagar la Universidad Católica, fueron a averiguar si había becas. Existía una beca y el examen era al día siguiente. Me dijeron: “Diego, tómate un bus (porque yo estaba en Sucre), estudia esto en la noche y mañana vienes a dar el examen. Estudié toda la noche en el bus, al día siguiente di el examen y me salió la beca para estudiar la carrera con todos los gastos pagados.

SUS ASPIRACIONES

CS. ¿Cómo ves la actual situación política del país?

DR. Creo que en el país, y en Latinoamérica en general, compartimos una misma cultura y es bastante polarizada. Entonces, lamentablemente, hay bastante división en nuestro país y eso se ha visto en las elecciones y en los resultados.

Creo que se necesita un gobierno conciliador, que no sea de izquierda ni de derecha, que no sea de oriente ni de occidente y que pueda realmente trabajar para todos los bolivianos. Yo estoy bastante optimista, creo que los bolivianos tenemos un enorme potencial y creo que hay muchos jóvenes interesados en aportar al sector público, y creo que las cosas pueden mejorar.

CS. ¿Qué reformas aplicarías en caso de llegar a la Presidencia?

DR. La labor del Gobierno tiene que ser efectivamente incentivar la labor privada, no puedes cortarles las manos al sector privado. Entonces, tienes que incentivar al sector privado para poder cobrarles impuestos y redistribuir este dinero.

Creo que las empresas estatales no funcionan, ahorita no tenemos ningún caso de éxito en que una empresa estatal genere ingresos; entonces, es un déficit para el Gobierno, se pierde dinero. Yo fomentaría más la empresa privada, pero sí mejoraría la forma en la que cobramos impuestos.

Sobre todo, invertiría muchísimo en educación: Bolivia invierte bastante en educación comparado con otros países de Latinoamérica, pero los resultados no son buenos. Entonces, no es solo invertir sino trabajar en un programa educativo que realmente funcione, que incentive el emprendimiento y que la gente aprenda inglés, porque eso te conecta con el mundo. Si nosotros queremos industrializar Bolivia, que es súper importante, necesitamos trabajar en servicios, crear servicios, crear productos, y para eso necesitamos hablar inglés. Para mí, ese sería uno de los principales desafíos.

CS. ¿Qué potenciales tiene Bolivia para el mundo?

DR. Bolivia es un país inmensamente bendecido por los recursos naturales que tenemos: tenemos montón de minerales, bastante gas, tenemos un montón de litio. Entonces, tenemos que aprender de nuestros vecinos: Chile ha hecho muy buen trabajo exportando minerales y trabajando con empresas privadas internacionales para poder trabajar en conjunto de forma que se pueda potenciar la industria.

Si pensamos eventualmente en extraer litio, industrializarlo e importarlo, es altruismo decir que Bolivia lo va a poder hacer a nivel estatal o solo con empresas bolivianas; no se puede. No tenemos la tecnología, no tenemos el conocimiento.

CS. ¿Qué recomendarías a los estudiantes bolivianos?

DR. Aprender inglés es mi mayor consejo. Te abre las puertas del mundo. No importa si quieres ir a trabajar a India, China o Alemania, siempre vas a encontrar a alguien que hable inglés, y todas las empresas y universidades hablan inglés. Y también es importante tener una experiencia en el extranjero, hacer una pasantía, un voluntariado, trabajar… te ayuda a entender cómo realmente son otras culturas, qué son las cosas que funcionan en otros países, y nosotros podríamos aplicar en Bolivia: viajar una o dos semanas no es lo mismo, no llegas a conocer la cultura, no llegas a integrarte y ver todas esas oportunidades.

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