Conejo estirado, tablitas y otros sabores de Corpus: ¿Pueden desaparecer?

Detrás del conejo estirado que comieron muchos chuquisaqueños este jueves de Corpus Christi está un trabajo de dos horas y media, según el cálculo del gastrónomo e investigador Fritz Hamel, quien también disfrutó de ese platillo típico para esta fiesta religiosa de las manos de un colega.

Chuquisaca comparte este plato con Cochabamba porque en este último departamento hay mayor producción de conejo, según dijo en una entrevista en Correo del Sur Radio.

Además de esta tradición culinaria, las tablitas de leche y el consumo de mandarina y maní son característicos de la región, mientras que en Potosí las sopaipillas, chambergos y tawa tawas son característicos y consumidos una noche antes, con una taza de chocolate. De hecho, la repostería especial en Corpus tuvo su origen en la Villa Imperial.

El recuerdo que muchos capitalinos tienen de este día son las mandarinas asoleándose en el patio para luego ser consumidas en familia.

¿Estas y otras tradiciones se están perdiendo? Ya que del altiplano y los valles sabemos más, ¿cuáles son los platos característicos en el oriente? Fritz llama a profundizar en la investigación a partir de los institutos de gastronomía y el impulso de las autoridades e instituciones públicas. Hace unos diez años, hubo un "boom" de emprendimientos gastronómicos, que ahora debe acompañarse de la investigación.

"Lamentablemente la investigación gastronómica en nuestro país y la recopilación de datos sobre algunos platos es muy escasa, muy vaga. Es eso en lo que se está trabajando y no se tiene que ir perdiendo ya que las únicas personas que podrían darnos esa información son nuestras abuelitas o de esa época", manifestó.

En Sucre, se llevó adelante la Feria del Cuy en la exestación Aniceto Arce este jueves.