Desafiando la informalidad: Mujeres que transforman la economía boliviana

Hoy, las mujeres en Bolivia encabezan el área empresarial con una participación de más del 40 %, un crecimiento económico que, aunque es significativo, todavía se enfrenta a un obstáculo mayor: la informalidad laboral.

A nivel nacional existen más de 378 mil empresas, de las cuales, según estadísticas del Monitor de Emprendimiento Global (GEM), alrededor del 47 % son creados por iniciativas de mujeres emprendedoras. “Actualmente, las mujeres emprendedoras en Bolivia están por encima del 40 %. Esto contribuye al ámbito económico y financiero porque crea fuentes de empleo e ingreso, a medida que van creciendo”, explica la mentora financiera, Leidy Flores.

De la misma forma, en un evento realizado por BancoSol, en octubre de 2023, Verónica Gavilanes, gerente general adjunta de la misma entidad financiera, precisó que en Bolivia, de 3 millones de mujeres que conforman la población económicamente activa, el 70 % son emprendedoras o empresarias; de las cuales, según estadísticas, el 82 % conforma empresas unipersonales, cifra que resalta la iniciativa y determinación de las bolivianas para dirigir sus propios negocios.

Tal es el caso de Vanesa, una mujer chuquisaqueña de 32 años que decidió iniciar su pequeño bar de comida saludable hace tan sólo unos meses: “Seis años de mi vida he trabajado dependiendo de una empresa como asalariada; pero siempre tuve el objetivo de tener algo propio, siempre me vi como una mujer exitosa que puede llegar a tener lo que quiera con su esfuerzo”.

El latente desafío: la informalidad laboral

Si bien gran parte del emprendimiento en Bolivia es liderado por mujeres, estas aún se enfrentan a factores que no permiten desarrollar todo su potencial, como lo es el trabajo informal. Se estima que 8 de cada 10 mujeres en el país es parte de este fenómeno; pero aun bajo esta condición las bolivianas continúan liderando el crecimiento del sector emprendedor.

Viviana, una madre luchadora que decidió montar su propio consultorio dental, relata: “Hay muchas mujeres que tenemos miedo a emprender, no solo porque la sociedad es complicada, sino por la competencia, por los pagos y los impuestos; pero cuando tienes un sueño tienes que dejar de lado todos tus miedos”.

Según un estudio orientado al perfil de las emprendedoras en Bolivia, realizado por el Instituto de la Mujer y Empresa (IME), las mujeres demuestran una actitud que se orienta a la búsqueda del bienestar social. De ahí la importancia de las emprendedoras, no solo por su contribución en la economía, sino por el impacto que sus negocios generan solucionando problemas humanos.

Micaela, una ingeniera cuya pasión es la danza, decidió iniciar su propio negocio enfocado al arte online: “Hoy en día las mujeres estamos abriéndonos paso, estamos pisando fuerte porque siento que tenemos la capacidad de aportar, no sólo con nuestro conocimiento; sino también con esa área sensible, porque no hacemos las cosas simplemente pensando en un beneficio económico, sino también en un beneficio social”.

Es entonces cuando surge la pregunta ¿cómo se puede maximizar el potencial de las mujeres emprendedoras en Bolivia? Justamente, a través de programas de capacitación que aborden las necesidades específicas que las bolivianas requieren para dar sus primeros pasos empresariales.

“El apoyo de diferentes organizaciones, empresas, entidades, permite fortalecer mucho más a las mujeres emprendedoras, para que salgan adelante con sus proyectos” explica Leidy Flores, quien también hace un año comenzó a incursionar en el mundo de los negocios digitales, y ha contado con el apoyo de programas efectuados por entidades financieras.

 

¡No están solas! Iniciativas y apoyo

Actualmente, diferentes entidades financieras cuentan con programas de apoyo para mujeres  emprendedoras, tales como AVANZA MUJER, una iniciativa del BancoSol que brinda soluciones financieras a las emprendedoras. Asimismo, existe el apoyo de organizaciones como SOYMUNAY, una empresa digital que ayuda de forma online a emprendedoras, para que estas desarrollen sus negocios de manera sostenible. Siendo estos solo algunos de los programas que se implementan en diferentes instituciones a nivel nacional.

A medida que continúan superando obstáculos y dejando su huella en todos los aspectos del contexto boliviano, las mujeres emprendedoras contribuyen significativamente al desarrollo económico y social del país, como generadoras de empleo; innovadoras, creativas y competitivas; desencadenando así un impacto positivo para el desarrollo nacional.