La Amazonía se declara en emergencia climática
El evento exige terminar con el extractivismo y reivindica la autonomía indígena
Tras cuatro días de debates y comprobación in situ, el Foro Social Panamazónico (Fospa), reunido en Rurrenabaque y San Buenaventura entre el 12 y el 15 de junio, concluyó que la Amazonía “ha llegado al punto de no retorno y se encuentra en emergencia climática”.
Frente a esa situación, los participantes de los nueve países proponen al mundo un “acuerdo por la vida para hacer frente al colapso climático y ecológico”, acabar con el extractivismo, desmantelar las infraestructuras petroleras siguiendo el ejemplo de Yasuní (Ecuador) y además de reivindicar la autonomía indígena sin ningún tipo de tutela estatal, según informó el portal “Sumando Voces”.
El Fospa es una articulación de la sociedad civil que agrupa a los nueve países amazónicos y que, en esta ocasión, contó con la presencia de más de mil participantes, los que, además de deliberar visitaron diversas comunidades indígenas para verificar el estado de situación. En el evento se debatieron cuatro ejes: pueblos y autonomías indígenas, madre tierra, extractivismos y alternativas, y resistencia de las mujeres.
MADRE TIERRA
“El colapso climático resultado de la deforestación y el extractivismo amenaza su supervivencia, la de las comunidades que la habitan, y pone en riesgo la vida del planeta entero. Los países responsables del calentamiento global deben asumir la deuda ecológica para la regeneración de la Amazonía y los países panamazónicos debemos transitar a un paradigma social del buen vivir”, indica una de las resoluciones del evento, que emergió del eje dos, referido a la madre tierra.
De acuerdo con el boletín de prensa, los participantes proponen el acuerdo por la vida “frente al fracaso del Acuerdo de París y la captura corporativa de las negociaciones climáticas, un acuerdo desde las bases para hacer realidad la demanda urgente de “cambiar el sistema capitalista y no el clima”, con el reto de “consolidar territorios libres de extracción petrolera, minería, deforestación, agronegocio, contaminación, falsas soluciones, libre comercio, militarización y violencia”.
El documento, además, declara que la Amazonía y sus ríos son sujetos de derechos. En ese marco, propone “un nuevo pacto social que reconozca al agua como sujeto de derechos, a través de un tratado andino-amazónico destinado a preservar su ciclo”.
Tomando en cuenta que la Amazonía ha perdido casi un millón de km² de bosques primarios y otro millón está degradado, para evitar el punto de no retorno y contrarrestar la degradación “es urgente revisar y derogar normas que promueven la deforestación, estableciendo regulaciones y sanciones estrictas para las actividades que causen la pérdida de bosques primarios y otros ecosistemas”.
EXTRACTIVISMO
El Fospa 2024 pide declarar a los territorios amazónicos libres de extractivismos, entre ellos el minero y el de los combustibles fósiles, de acuerdo a las conclusiones que emergieron del eje 3, referido a los extractivismos y sus alternativas.
AUTONOMÍA
El Foro Social Panamazónico reivindica su derecho a ejercer la autonomía sin ninguna tutela estatal y exigen garantías para la aplicación de la justicia indígena.