El FITAZ levantó el telón en Chuquisaca para celebrar el Bicentenario

“Ha sido una fiesta del teatro, una semana de mucho teatro y de mucho interés de la gente”, dijo Denisse Arancibia, encargada de logística, a Correo del Sur Radio, cuando las calles de Sucre, entre el 6 y el 11 de mayo, se convirtieron en el gran escenario donde los espectadores interpretaron su propio papel como actores privilegiados del más significativo momento para su ciudad y su departamento: la conmemoración de los 200 años del nacimiento de su patria.

La potente cartelera de la Fiesta Teatral del Bicentenario convocó a más de medio millar de personas que asistieron a 11 presentaciones en escenarios insólitos de Sucre y provincias de Chuquisaca. Más de 30 actores bolivianos y extranjeros lograron emocionar al público, que por momentos se ponía en el papel de los personajes, explorando sus propias emociones.

“Esta edición ha sido muy especial y ha permitido que este evento tenga más relevancia nacional, en homenaje al Bicentenario de Bolivia, al departamento de Chuquisaca y, en especial, a la ciudad de Sucre, nuestra capital. Es algo que agradecemos mucho y que nos llena de alegría y orgullo”, afirmó Bernardo Arancibia, director del FITAZ.

“Los objetos de mi memoria”, del Teatro Apátrida de Chile, presentado en el MUSEF, rescató personajes comunes de Sucre para contar su historia a través de objetos preciados como una muñeca negra o una fotografía de la Guerra del Chaco. En el Salón de Convenciones de la Gobernación, en cambio, una gradería llegó hasta el cielo, desde donde el público contemplaba “Ofelia y el ajayu de Hamlet”, “Willaku, la suerte del indio poeta” o descubría a “El Himnovador”, sosteniendo la respiración en cada línea del guion y acompañando, con el compás de su aliento, a los actores del Teatro Los Andes, La Cueva, El Astillero o Nexoteatro (España), con la historia de “Nancy Grace Roman”.

En las provincias y municipios como Tarabuco, Yamparáez o Maragua no fue menos emocionante ver las puestas en escena con personajes gigantes o íntimos monólogos que transportaron a la gente hacia una realidad paralela, donde su mundo interior era interpretado frente a sus ojos. Los aplausos fueron de pie para “La muerte de Jesús Mamani”, “Viaje al corazón de la Madre Tierra” o los títeres de “La Gatita Pastora”.

Los conversatorios reunieron a grandes personalidades que revisaron hitos del teatro nacional, entre ellos Homero Carvalho (Beni), Maritza Wilde (La Paz), Gustavo Calisaya (Oruro), Gisela Derpic (Potosí), Nils Puerta (Tarija), Claudia Edis (Cochabamba) y Carlos Ureña (Santa Cruz). El FITAZ en Sucre tiene el potencial de repetirse, para que el telón de las nubes vuelva a levantarse sobre esta ciudad, escenario natural para el arte en todas sus expresiones.