Culturas cancela la Feria Internacional del Libro

La esperada Feria Internacional del Libro en Sucre, que a un principio debía realizarse del 6 al 13 de julio y, luego, del 13 al 20, fue suspendida por decisión del Ministerio de Culturas.

Así lo confirmó a Correo del Sur Radio David Pérez Hidalgo, gestor cultural y uno de los organizadores del evento. La cancelación, que llega tras meses de trabajo y una reprogramación previa, generó preocupación porque la organización enfrenta deudas, ahora, sin respaldo institucional.

“CON DEUDA”

“Nos dejaron con deuda”, dijo Pérez Hidalgo al relatar que cuando todo estaba prácticamente listo, recibieron desde Culturas la inesperada comunicación de que la feria no se llevaría a cabo.

“Nosotros (estábamos) totalmente dispuestos a empezar en noviembre, como era lo más prudente”, añadió al recordar que comenzaron a trabajar en agosto del año pasado y que el cambio de autoridades y la falta de desembolsos complicaron el proceso.

También denunció que la interlocución con el Estado fue inestable. “Durante todo este tiempo, la persona de enlace (del Ministerio de Culturas) con la que me reunía ha cambiado muchas veces: me he venido a reunir con cinco o seis personas diferentes”.

Esto, por lo que comentó el organizador, dificultó la continuidad del proyecto.

DOS PRESUPUESTOS

La feria iba a desarrollarse en el centro cultural La Sombrerería – Matilde Casazola, lugar que necesitaba refacciones.

Según Pérez Hidalgo, se manejaron dos presupuestos: uno de Bs 1,3 millones, solicitado por la organización, y otro, sugerido por el Ministerio, de Bs 3 millones, para mejorar las condiciones del espacio elegido.

Sin embargo, finalmente, ninguno de estos montos fue desembolsado.

LA CÁMARA DEL LIBRO

La Cámara Boliviana del Libro, institución nacional sin fines de lucro, había asumido el rol de contraparte para llevar adelante la feria en la capital del país integrando a las cámaras departamentales de La Paz, Cochabamba, Santa Cruz y Tarija.

La idea era también consolidar la cámara departamental de Chuquisaca, según reveló Pérez Hidalgo. A pesar del respaldo y la experiencia acumulada desde 2017, el proyecto quedó en nada. “Al final todo estaba casi cerrado, pero entró una nueva autoridad que tenía otra visión”, agregó, dejando en evidencia la fragilidad con la que se gestionan los grandes eventos culturales en Bolivia.

“Teníamos por lo menos un 80% de adelanto, cuando nos dicen ‘no’”, dijo antes de revelar que, según les comunicaron, la feria en Sucre era “un mandato presidencial” y que este tema se trató incluso en el gabinete ministerial. Por eso, hace unas semanas remitieron al presidente Luis Arce un informe completo de lo efectuado hasta ahora para concretar lo que se esperaba fuera el evento cultural más importante del año del bicentenario.