María Elena Urquidi asume el rol de Primera Dama tras 20 años de ausencia institucional en Bolivia

Con la posesión de Rodrigo Paz como presidente de Bolivia, prevista para este sábado, María Elena Urquidi se convertirá en la nueva Primera Dama de la Nación, una figura simbólica e institucional que regresa al escenario público después de dos décadas.

Durante los últimos 20 años, Bolivia no contó con una Primera Dama. En el largo período del Movimiento al Socialismo (MAS), el expresidente Evo Morales no tuvo cónyuge, mientras que su sucesor, Luis Arce, optó por mantener a su esposa Lourdes Durán fuera del ámbito protocolar y sin funciones oficiales.

El retorno de esta figura institucional marca un cambio en la dinámica del Estado y refleja la intención del nuevo gobierno de revalorizar el papel de la familia y la participación ciudadana en iniciativas sociales, educativas y de cooperación, tradicionalmente impulsadas desde el despacho de la Primera Dama.

Urquidi acompañará al presidente Paz en los actos oficiales de transmisión de mando, que se realizarán en la Asamblea Legislativa Plurinacional a partir de las 10:00 de la mañana. Posteriormente, se espera que impulse una agenda enfocada en programas de apoyo a la niñez, la mujer y la salud pública, retomando el espíritu de servicio que caracterizó a las primeras damas bolivianas antes de 2006.

Con su incorporación al ámbito institucional, Bolivia recupera una figura representativa del protocolo estatal, ausente por dos décadas, y abre una nueva etapa en la que la Primera Dama podría tener un rol activo en la promoción de valores sociales y culturales del país.